Paco de Lucena
Hace dieciocho años
Gabriel Muñoz, dio una conferencia en un patio del
Palacio de Orive.
"La guitarra flamenca de concierto desde Paco de Lucena a la actualidad".Formaba parte de su tesina doctoral. La grabé entera en audio y algunos vídeos. Hoy
Juan Velasco ha publicado
Cordópolis un artículo sobre
Paco de Lucena, que me trajo recuerdos de cuando conocí la existencia de este guitarrista, en la citada conferencia. El mencionado día de hace dieciocho años,
Gabriel Muñoz que acompañaba la disertación con piezas musicales referidas al artista del que hacía la semblanza, al leer el apartado dedicado a
Paco de Lucena y mencionar su nombre, un asistente levanto la mano y le dijo:
-Creo Gabriel que se ha confundido, ha dicho Paco de Lucena en lugar de Paco de Lucía. –No,-le contestó Gabriel-
cuando tocaba Paco de Lucena, Paco de Lucía no era ni siquiera proyecto de persona.
Gabriel Muñoz
Paco el de Lucena, Francisco Díaz Fernández, nace en 1859 y muere en 1898, con 39 años, víctima de la plaga de ese tiempo la tuberculosis. Dicen que antes se llamó Paco el Lentejo por haber nacido cuando su madre recogía lentejas. El próximo día 15, en Lucena se presenta el libro de Francisco Calzado Gutierrez, publicado por La Droguería: “Paco de Lucena: de la génesis al ocaso”, será a las 20:30 h. en el Teatro Palacio Erisana, contando para ello con el autor, el editor y el guitarrista, Alejandro Hurtado.
El cartel de presentación del libro
Comentó en su conferencia Gabriel Muñoz sobre Paco de Lucena: Francisco Díaz Fernández. Lucena (Córdoba), “Barbero en sus años jóvenes, pues hijo de un humilde obrero del campo, después de aprender las primeras letras entró de aprendiz en la peluquería del maestro Espinosa, condición que puso él expresamente porque "toca muy bien la guitarra, y yo quiero aprender a ser barbero y a tocar la guitarra, si el maestro quiere enseñarme". El maestro quiso, y lo hizo tan bien que todo el aprendizaje de Paco de Lucena es una fulgurante carrera en que constantemente supera a su maestro.
La Parrala y Paco de Lucena
Al iniciar sus actuaciones públicas primero le llamaron El Lentejo y después el Niño de Lucena. Y ya en Málaga, donde había once cafés cantantes abiertos, en el de Bernardo hubo de sustituir una noche a Paco el Águila, tocaor oficial de la casa, que se había puesto enfermo. Lo hizo con tal éxito, que cuando El Águila volvió Bernardo contrató en firme al de Lucena como segundo guitarrista. La rivalidad entre los dos fue inevitable, en unos tiempos en que la competencia entre los propios artistas era tremenda y, con frecuencia, despiadada. El de Lucena quería ascender pronto y cada noche sus falsetas eran más espectaculares, y las ovaciones y el entusiasmo del público más apasionados.
Juan Breva y Paco de Lucena
El Águila quiso entonces dar una lección al más joven, y una noche sacó un guante, se lo puso en la mano izquierda y le tocó así a un cantaor. Ni corto ni perezoso el de Lucena se quitó un calcetín, se lo puso en la mano izquierda y ejecutó un solo que llevó el delirio a la sala. Paco de Lucena fue marido de Trinidad la Parrala, –dicen, aunque no figuraba en su partida de defunción- con quien trabajó en París y en otros muchos países, literalmente de triunfo en triunfo. Está considerado artífice de una auténtica revolución en la guitarra flamenca, que no pudo culminar por su prematuro fallecimiento. Esa revolución estaba destinado a concluirla su discípulo "de segunda hornada" Ramón Montoya. Entre sus principales aportaciones al toque flamenco están su estructuración de la caña y la creación del toque por rosa.”
Paco de Lucena y la Parrala
Dice Juan Velasco en Cordópolis: "Según explican desde el sello, la obra está trufada de pruebas hemerográficas, fotográficas y archivísticas y, además, incluye un CD en el que los guitarristas Alejandro Hurtado y Mariano Delgado, especialistas de este período, interpretan las piezas que se conocen del guitarrista y de otros contemporáneos al lucentino. Todo esto ayuda al lector a situarse lo más fielmente posible en el contexto en el que se desenvuelve la obra. Además, en las últimas páginas del libro, ambos guitarristas analizan las piezas interpretadas mediante una guía de escucha con detalles interesantes.
Maestro Jonjama, Paco de Lucena y Juan Breva
Y sobre la presentación continúa Juan Velasco en Cordópolis: “Juan Breva y Paco de Lucena. La presentación se establecerá en siete partes: la primera será la Ventana del Génesis, donde se descubre la procedencia y árbol genealógico de Paco El Lentejo, en el que existen unas circunstancias muy particulares, su entorno familiar y social en los primeros años de su vida en su pueblo. La segunda adentrará en el sueño de un niño que quiere ser artista y narrar el aprendizaje fulgurante y las personas claves para su formación musical -estuvo vinculado artísticamente a Juan Breva y aprendió de Rafael Nieto Tamarit-.
Loco Mateo, Loca Matea, Paco de Lucena y la Pitraca
La siguiente habla del deseo y muestra su personalidad y madurez, la rápida expansión de su fama y la conquista meteórica de sus primeros escenarios, Málaga, Córdoba, Sevilla, Madrid, entre otros grandes tablaos. En la cuarta contemplamos el triunfo, su primera gira europea, formando pieza clave de la compañía de Antonio Calzadilla, que lleva todo un montaje escenográfico muy aclamado por los distintos públicos, y que recorrió los mejores escenarios de las ciudades de París, Praga, Berlín, Viena, Budapest, Bratislava, Lieja, Bruselas, etc.
La siguiente de ellas se asoma al delirio, recorre toda España de norte a sur y de este a oeste, consolidándose definitivamente como guitarrista excepcional, y dando el salto a América, Cuba y Chicago. La penúltima de ellas deja patentado su destino como concertista de primer nivel, en su segunda vuelta a París, donde actúa ante la Reina Isabel II, y el embajador de España en Francia, en los teatros y salones más exclusivos del momento: Sala Erard, Teatro Roskoft, Galeríe Vivienne, etc. La última analiza su genio, su música, todo cuanto dijeron personalidades, artistas, escritores, poetas, periodistas y público que le siguieron y anuncia su ocaso, su fallecimiento y el olvido en su tierra.”
Rafael Carreras en su barbería de la Espartería
Hubo lugares a los que había que visitar, tras volver del campo los temporeros, el regreso era para la
“vestía”, cada dos o tres semanas, cambiarse de ropa y arreglarse el cabello, arreglarse los dientes y escuchar cante flamenco, los colmaos y los cafes no se podían frecuentar. Esos sitios fueron las barberías. Por lo general, los barberos no solo estaban para afeitar y cortar el pelo, eran sangradores y dentistas, también manejaban la guitarra.
Gabriel Muñoz, en la conferencia en el patio del
Palacio de Orive, citó que
Francisco Sánchez Cantero, natural de
Cádiz y
Paco Díaz Fernández,
Paco de Lucena, ambos barberos, fueron de los primeros concertistas de guitarra flamenca. Luego, también la cuestión flamenca estaba ligada a la barbería. Cuidado, y al cante, porque mi abuelo
Rafael Carreras además de tocar la guitarra estaba dotado también del duende del cante flamenco antiguo cordobés, como certificó el escritor
Eugenio Noel.
Propuesta de monumento a Paco de Lucena
Paco de Lucena, un olvidado guitarrista, virtuoso según sus actuaciones e historiadores, del que no quedan ni los restos, pues ni se sabe ni el lugar de su entierro. Incluso los últimos años de su vida los pasó en la más absoluta indigencia Y de sus trabajos no hay ningún disco o grabación. Todo lo que tenemos es la memoria oral. Lo cierto es que fue un revolucionario en su tiempo, posiblemente el primer o uno de los primeros guitarristas flamencos de concierto, del que solo queda lo escrito en la memoria de unos y otros contemporáneos suyos.
Fotografías de Internet y del autor.
Bibliografía de Cordópolis (Juan Velasco) y Gabriel Muñoz