Vista satelital de la superficie del embalse
Ayer decidí ir a ver cómo andan los pantanos de Guadalmellato y Navallana, que son los que nos afectan directamente a los cordobeses/as. Sobre todo a valorar como le está afectando la sequía persistente que nos aqueja. Hacía años que no recorría esa carretera -la CH-1-, la he hecho varias veces en bicicleta, y hasta Obejo en coche con mi hijo Gabriel. De triste recuerdo cuando mi hijo Paco con 13 años, allá por 1988, involuntariamente nos dio un gran disgusto. 
Primera piedra del embalse 1909, ministro Sánchez Guerra
Comitiva del ministro por el río 1909
Construcción de la presa 1917
Presa 1931
Ministro de Obras Públicas, Alcalde y obispo reforma de la presa
Salió con la bicicleta después de comer y no supimos de él hasta el día siguiente por la mañana, después de toda una noche sin noticias suyas y de buscarlo por todas las carreteras y cunetas pensando en lo peor, con la solidaridad de mucha gente del barrio. Al final cuando se hizo de día –nos imaginamos la noche que pasaría- bajó a la presa y un amable y desconocido trabajador de Emacsa lo montó en el coche y lo trajo a Córdoba, después de acabar su jornada. No se les ocurrió llamar por teléfono.
Presa vuelo 1956
Presa vuelo 1977
Presa vuelo 2010
La ocurrido fue que, basándose en unos mapas del ejército, pensó que por ahí podía ir a casa de su tía Loli que vivía en Cerro Muriano, y a lo mejor hubiera ido llegando a Obejo antes, si no se le hubieran pinchado las dos ruedas, no llevar material de reparación y además echársele la noche, y pasarla debajo de un olivo. La carretera, que es la CH-1 de la Confederación Hidrográfica, una vez pasada la presa sube a la Sierra de los Puntales, con un notable desnivel desde el cortijo de Puntales Bajos, para orillar después el pantano.
Azud y derivación canal riego vuelo 1956
Azud y derivación canal riego vuelo 1977
Azud oculto agua presa Navallana 2010
Diez mil curvas y 23 o 24 km. de unos paisajes maravillosos. Se convierte en la Vereda de los Pañeros en algunos tramos, cruza el Guadalbarbo por un hermoso valle, dejando los cerros de Cabeza Chica y Cabeza Gorda a la derecha, y acabar en la CO-3406 en su cruce con la A-3176 que viene de Villaharta, después de pasar el cortijo de la Tía Manuela y el Dolmen de la Camorrilla en el cortijo del mismo nombre. Cuando recorrí esa carretera tenía tramos totalmente destruidos que pasarlos se asemejaban a esas carreteras andinas americanas o guardando las distancias, con algunas del Himalaya.
Presa embalse Guadalmellato
Vista de la carretera por la presa
Al fondo la CH-1 subiendo a la sierra de los Puntales
Hasta llegar a la presa, después de pasar el Puente de los antiguos sifones, sobre el Pantano de Navallana, también se las trae la CH-1. Hay que reconocer que es un camino de servicio del pantano, pero la realidad es que es temible encontrarse con un camión en sentido contrario en algunos tramos. He de manifestar que en bicicleta, que vas pendiente de superar los desniveles, no es lo mismo que en coche.
La presa y Peñas Rubias (foto Google)
Instalaciones a pie de presa
Río Guadalmellato
Si hubiera podido, hubo momentos que a lo mejor me hubiera vuelto, porque ni eso permite, dar la vuelta, siempre con riesgo de caerte a la cuneta. Pero al igual que el tramo pasada la presa merece la pena por el paisaje, lo que pasa es que la admiración del mismo está destinada a los pasajeros, yo no tenía tiempo de disfrutar de éste pendiente de las curvas, y rogando sobre todo no viniese un camión de frente.
Detalle de la lámina de agua
Otra vista
Margen izquierdo
Llegada a la presa comprobé que las señales de máximos, como lo vimos en cierta ocasión, me imagino que sería un lleno histórico, no es tanto, la lámina de agua tiene un desnivel de menos seis metros aproximadamente. Claro eso sumado a la superficie de la lámina de agua, que ronda las 780 Ha, son muchos hm3. La capacidad total de este embalse es de unos 154 hm3, y está en este momento a un 38% de su capacidad, unos 60 hm3.
Puente sobre el Guadalbarbo de la CH-1
Vista de la isla del Morabito que normalmente está cubierta
Morabito en la isleta central (Foto Cordópolis)
Se termina de construir en 1928, durante la dictadura de Primo de Rivera, poniendo la primera piedra en 1909, según podemos ver en las fotografías de la visita del ministro cordobés Sánchez Guerra, y se aumenta su capacidad con el recrecimiento de la presa, para pasar de los 60 hm3 a los casi 154 hm3 actuales. Esta última obra ocurrió durante el mandato en la Alcaldía de Antonio Cruz Conde, de 1951 a 1962.
La CH-1 antes de llegar a la presa (Foto Google)
La presa desde la CH-1 (Foto Google)
Al fondo Peñas Rubias (Foto Google)
En ese tiempo se decía que al ser Ministro de Obras Públicas su suegro, el Conde de Vallellano, se habían conseguido obras de categoría para la ciudad. La realidad, aparte de las cuestiones técnicas e históricas, es que estamos pasando una sequía considerable y que la negación de que algo está ocurriendo con el clima, no es adecuada.
Nuevo puente de los Sifones CH-1
Colas de la presa de Navallana
Antiguo canal y sifón margen izquierdo
Antiguo sifón salida margen derecho
Es cierto que ha habido periodos climáticos adversos, pero en este tiempo los tenemos más a flor de piel y más exagerados. Y lo más normal es que la mano del hombre… y de la mujer, tenga algo que ver en ello, como lo llevan denunciando muchos años los científicos. No me causó sensación de tragedia la visión del embalse como la visión de otros embalses, a pesar del porcentaje de almacenamiento. Esperemos que la primavera y abril, el de las aguas mil, nos permita una recuperación hídrica considerable.
Otras entradas sobre el Guadalmellato:
Antiguo trazado del Canal de Riego del Guadalmellato
Actual trazado del Canal de Riego del Guadalmellato
Fotografías del autor, Cordópolis y Google
Bibliografía de Wikipedia y CHG.
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