Wikiloc Fuente del Helechar
Wikiloc de José Javier Navas
Para bajar por el oeste el techo de Córdoba ciudad, y rodearlo por abajo por el Lagar de Torreárboles y Valdegrillos para luego bajar también, lleno de más explotaciones mineras al mismo lugar de la explanada de partida. Por debajo de la cual discurre el Arroyo del Helechar entubado, buscando después kilómetros abajo, cuando se le unen el Balanzonilla y otros hermanos menores en el Arroyo de Linares. Este arroyo nace en la solana de Torreárboles, si miramos el catastrón de 1950, hoja 65,2, se ven claramente las vertientes que lo alimentan en las fincas del Helechar y Capellanía.
Plano Catastral de 1950
A cuatrocientos metros escasos de la explanada citada, está la Fuente del Helechar, inconfundible por su enorme depósito circular, coronado de espesa vegetación del que destacan florecidas adelfas. En la rocosa pared, se intuyen un par de surgencias, protegidas por muretes artificiales, que vierten en el depósito y cantarinamente suenan además. Antes hemos cogido (hablo en tercera persona pero voy solo bueno con mis miedos) la bifurcación a la izquierda, camino perfectamente tallado, porque de seguir nos hubiera llevado a la Ermita de la Virgen de los Pinares, pasando por otro camino, que sube a la altura del túnel de la Mocha, para después de pasar una pequeña cantera y una alberca artificial en la roca, cuando llueve, encontrarse con el que sube.
Explanada carretera N-432a
Antigua Venta Torreárboles
Toda esa zona lo es de pequeñas explotaciones mineras que, como hormigueros de mineral, dejan en las puertas de sus bocas el material de desecho, que hace escurridizo el paso por su cercanía. La fuente que no figura en el catálogo Conoce tus Fuentes. Figuraba en el catastrón de 1950 como "alberca en ruinas". Más arriba en el arroyo si databa tres pozos. El camino de subida es suave con un desnivel hasta la fuente de 22 m.. Está tallado como digo, en uno de sus lados, el otro es el arroyo.
Nada más entrar al camino la tubería de la fuente
A partir de ahí el camino desaparece por ello mi admiración por José Javier y su mascota, subir es una odisea campo a través. Recuerdo una vez que subimos unos amigos a Torreárboles, cuando íbamos a bajar le preguntaron a un señor que si había camino para llegar a la explanada que estamos citando, les dijo -Sí seguidme, pero había que echarle un galgo, se les perdió y con él el camino de bajada que era ese que citamos.
El camino
Yo había bajado con el coche con otra senderista que estaba embarazada, a esperarlos en la explanada fue una verdadera odisea la bajada de Juan, José Manuel (el feliz esposo de la embarazada), Manolo que cual carretero maldecía el momento que había decidido bajar por allí, y Conchi que se quejó poco como los demás pero bajaron, cuestión que quedó en su haber, mientras que a Manolo en el debe, por lo que le recordábamos a cada momento aquella bajada que tan mal le sentó.
Vergüenza de usuarios
Si José Javier Navas Pedregosa es para mí el paradigma de la experimentación y comprobación de las rutas cercanas, como he señalado más arriba, Serafín Parra, fue pionero y dejó escritas reseñas y realizadas fotografías de la mayoría de las fuentes de Córdoba incluida esta del Helechar. el Sr. Amo también la cita, aunque en zona distinta, a mi modo de ver. En las Ordenanzas de 1884 figura en el sexto distrito como Fuente del Helechar. Y el arroyo lo glosa Carrasco, pero como el de Linares que lo es luego más abajo.
Más cerdos
Y como es lógico está recopilada en la página de la Plataforma A Desalambrar, que tan sabiamente mantiene Manuel Trujillo. Además es mi libro de cabecera ante cualquier duda que me surge, ya que los planos toponímicos y detalles, son de nuestra época ya interpretados. Así que gracias a la ruta de José Javier y su mascota, y la envidia que despertó en mí el recorrido, decidí visitarla esta mañana, porque era la ruta acorde a mis posibilidades físicas, que cada día que pasa son menores.
Antes toallitas y plásticos ahora mascarillas
Descripción de Serafín Parra
“En el nacimiento del arroyo del Elechar (sic), hay unas construcciones, de alberca y pilar dentro todo esto, junto con un pozo en el cauce del arroyo, el manantial está tapado y vierte el agua al pozo, y todo esto lo usurpa en su totalidad, el chalé que hay por detrás del restaurante que hay por bajo del Frenazo. Una inversión tremenda, entre lo que es conducir el agua hasta allí y el camino que mantiene hasta la fuente. El conjunto no es feo, pero es tan patente la mano del hombre, reciente y chapucera que desmerece mucho. Acceso: Por la carretera antigua de Cerromuriano, el restaurante que hay por bajo del Frenazo (tiene nombre, pero es chino y no me he quedado con él), frente hay una explanada, a la otra parte de la carretera, esta está limitada por una alambrada que has de pasar y sólo hay que seguir el camino hasta terminarlo hacia arriba, nos encontraremos con el conjunto.”
El Sr. Amo en su libro Las Aguas de Córdoba la cita en la listas de las "Fuentes realengas por su notoriedad", como: "Fuente del Helechar en los Villares". Mi duda está en que dice los Villares y dista bastante el paraje del lugar de la fuente, lo que me inclina a pensar que es otra la citada.
El inicio del camino a la Fuente
Helechar A Desalambrar
"La menciona el sr. Amo: “Fuente del Helechar en los Villares”. Está en la lista de las Ordenanzas Municipales: sexto distrito, “Fuente del Helechar en terrenos de la Capellanía de la Balanzona” y en el Catastrón nº 65 (hoja 2ª y última) lo marca como "alberca y pozo en ruinas". En la ubicación de la fuente lo que hay es un gran depósito, y unos nacimientos que parecen tapiados. Del depósito sale un chorro de agua (abril de 2021). Llegar es muy fácil, desde la antigua carretera de Cerro Muriano, un sendero bien marcado se divide en dos: a la derecha sube con un gran desnivel hacia la Ermita de los Pinares. A la izquierda, un poco más difuminado, pero se ve que va sobre un antiguo carril, nos lleva a donde estaba la fuente, un lugar muy bonito. Ahí se acaba el sendero aparentemente.”
No quiero terminar sin citar lo que recoge el Sr. Carrasco en su libro Arroyos de Córdoba referido al arroyo de Linares, más poeta que geógrafo para mí, pues no cita que el Arroyo de Linares en su niñez es el Arroyo del Helechar, junto con otros hermanos menores.
Desde el depósito
Posible mina protegida
ARROYO DE LINARES
“Es el afluente más importante del Rabanales. Nace en Torre-Árboles; atraviesa la carretera de Cerro Muriano por el km. 259 y el viejo ferrocarril por el km. 12. Entra en la huerta de la Balanzona, abandonada en triste ruina. Riega su antiguo naranjal destrozado. La casa desolada. Va el arroyo por cauce muy hondo y cerrado de zarzal agresivo. Al sur de la huerta existe un túnel de los varios que daban paso al tren de la Sierra, y en la antigua estación aún puede verse un depósito que surtía de agua a las máquinas de vapor. Por encima de la estación de la Balanzona nacen el Balanzonilla y el Salado, que cerca de la casa de las Pitas se unen al Parrón que nace en San Cebrián Alto, bajando los tres juntos por la cara este de la Loma de los Escalones buscando al de Linares.
Siguiendo el curso de éste, vemos la Huerta de Mena con buen olivar que vigilan desde la altura San Enrique y las Albarizas. Pasa el arroyo ahora por un verde cañaveral muy frondoso, donde se distrae el viento y, nos complace con su música otoñal, y algo más abajo un bosquecillo de olmos resignados con su grafiosis por los que se agarran las zarzaparrillas. Deslizase hacia las fincas San Cebrián Bajo y Los Velascos donde se le juntan Balanzonilla, Salado y Parrón. A esta altura se encuentra un viejo puente romano casi destruido que era paso de una vía romana, hoy Cañada Real Soriana que sube hasta la Mesa de los Escalones.
Llega el arroyo a las inmediaciones del Santuario de Linares, cruza un puentecillo donde hay un manantial y por la alameda se interna haciendo linde a la huerta de Dos Fuentes por rica chopera que, en primavera, fecunda el ruiseñor con la armonía de su flauta. Ya en la linde de Navalagrulla con la Campiñuela Alta se une al Rabanales al pie fresco de un almezo, justo junto al camino de servidumbre que la propiedad de esta última finca ha cortado caprichosamente.”
Por lo tanto este ha sido el periplo serrano esta mañana, por la solana de Torreárboles, en terrenos de la finca Capellanía, incitado por el recorrido que José Javier Navas y su inseparable mascota Link (personaje como me dice José Javier de un video juego “The Legend of Zelda”), a los que envidio, iba a decir sanamente pero no, es envidia “joía”, ya que la envidia no puede ser nunca sana. La Iglesia católica la considera pecado capital, aunque eso a mí me da igual.
Selfie José Javier y Link (Foto José Javier Navas)
Para Santo Tomás de Aquino, es “tristeza del bien de otro”, buena definición. Dante en su obra el Purgatorio dice que es: "Amor por los propios bienes pervertido al deseo de privar a otros de los suyos." Un cazador de brujas de la Edad Media Peter Binsfeld, dijo que era patrimonio de un demonio marino que se llamaba Leviatán, al que solo controlaba Dios. Así que de sana, nada de nada.
Fotografías y vídeo del autor, José Javier Navas, Wikiloc y otros
Bibliografía la citada y Wikipedia en lo de la envidia
Paco, gracias por tu consideración.
ResponderEliminarAlguna vez creo que te lo he mencionado, tu y este blog tienen parte de culpa de mi desgaste de suela por la Sierra de Córdoba.
Tu minuciosidad buscando, rebuscando, información fidedigna le dan otra dimensión a mis paseos por Córdoba,y por su entorno.
Pendiente queda, cuando la situación lo permita, desvirtualizarnos y que me permitas acompañarte en un paseo y aprender, de viva voz, nuevos datos de nuestra amada Sierra.
Gracias.
Pepe muchas gracias, soy yo el que se siente honrado y agradecido por tu seguimiento. Ojalá podamos algún día cuando pase este asunto que nos trae a maltraer podamos dar un paseo, pero mi ritmo es distinto al que tu llevas, cada vez esta uno en manos forma. Pero lo tenemos en cartera. Un fuerte abrazo y una caricia a Link.
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