FALTA DE ÉTICA CON O SIN INTENCIÓN PERO FALTA DE ÉTICA.

Fotografía original facilitada por Miguel Navas

No puedo pretender que la mediocridad no llegue hasta el último escalón de nuestra sociedad, porque los escalones altos, que son los que deben hacer pedagogía, están llenos de ella. Vemos regalos de másteres, de carreras universitarias y muchas corruptelas académicas. Me refiero a esto porque se está perdiendo la mínima ética indispensable en la publicación de determinadas noticias y fotografías, en las redes y medios informativos. Se están olvidando las formas en referenciar tanto la autoría, propiedad o esfuerzo investigador de determinados trabajos de los demás, cuya pertenencia intelectual algunos se abrogan, indirecta o directamente, salvo honrosas excepciones. La realidad es que yo considero que cuando una cosa se publica, desde ese mismo momento es pública, pero no considero menos en reconocer a que quien se ha dado el trabajo de investigar, de recopilar datos o de buscar en múltiples cajones, tiene todo el derecho a ese simple reconocimiento. No se están pidiendo royalties, porque en ello no va ningún tipo de compensación económica, sólo reconocimiento al trabajo hecho por una persona del que se están aprovechando otras y recibiendo multitud de parabienes por una autoría que no es suya. Estas autorías desde luego son de corta y pega, tipo libro de Ana Rosa Quintana. Y lo denuncio porque lo que no se dice no existe.

Fotografía recortada en blanco y negro de la original

Esto viene porque hay muchas páginas en las que publican fotografías y textos de todos sitios y no ponen la procedencia, y no entrecomillan los escritos para diferenciarlos de su autoría. Por ellos luego reciben cientos de parabienes de otros escalones más bajos que consumen y solo ven una fotografía (normalmente no se leen mucho los textos) y desconocen el esfuerzo de las personas, que han buscado en fototecas, o las tenían en la caja metálica de carne de membrillo de su abuela, o de sus padres. Claro las contestaciones que les dan a quienes los felicitan como si fuesen los autores es también estándar, como el hecho criticable: “-Muchas gracias (el nombre que proceda). Me alegro que te guste”. Más o menos es el modelo. Pero si miras en el texto de cabecera, o en el pie de foto, nunca (o muy pocas veces) figura de dónde procede, o quien es el autor y la fecha si se conoce, y ahí está lo que considero la falta de ética. Claro no pueden extenderse en más explicaciones en los textos porque no las tienen.

 

Página de búsqueda en Google

Todo viene por el hecho de que una persona me facilita, unas fotografías del barrio de la Judería. Yo le pido permiso para publicarlas en este blog, entendiendo que son propiedad suya, simplemente porque se refieren a una casa de su familia. Al final como casi siempre, reflejo que las fotografías han sido facilitadas por, en este caso Miguel Navas y autorizada su publicación, porque alrededor de las fotografías hay historias personales que hay que tratar con mucha delicadeza y no publicar porque la familia simplemente no quiere. Como siempre debe existir el beneficio de la duda, pudiera ser que la fotografía en cuestión venga de una fototeca, de la misma que la sacó quien me la facilitó a mí, entonces ¿Por qué no se pone la procedencia? Es simple verdad. O más fácil poner: fotografía o texto de autor desconocido. A mí se me ha dado alguna vez el caso de desconocer el autor, encontrarte la fotografía en Internet y no poder referenciarla, llegar el autor y decirme es mía y faltarme tiempo en rectificar y poner la referencia. Pero sé que es predicar en el desierto.

Fotografías similares a la búsqueda de Google

Todo este asunto, está referido a una publicación de la fotografía de un puesto de melones en la Calle Cardenal Herrero en una página de Facebook que se llama Cordoba Antigua (España).  

La fotografía en cuestión fue facilitada por un amigo que se llama Miguel Navas, como figura al final del Blog en los créditos. “Fotografías facilitadas la mayoría por Miguel Navas Palma, al que agradezco su deferencia en la autorización de publicación de fotos y texto, otras de Diario Córdoba. Bibliografía: texto en cursiva de Miguel Navas.” 

Entrada del Blog Notas Cordobesas “Más historias entrañables de la Juderia” 

En cualquier fotografía pulsando en ella con el botón derecho te da opción en un menú a buscar fotografías similares, o encontrar la solicitada, así como los lugares en las que está publicada o se puede encontrar.

Referencia de Google de lugares donde se publica la foto

CONCLUSIÓN

Como se puede comprobar la fotografía en cuestión es la que encabeza esta entrada. Es de color sepia como las fotografías de principios del siglo XX, escaneada de una revista gráfica posiblemente (no se lo pregunté a Miguel), que yo por una razón personal de gusto, le quito los colores sepia y la pongo en blanco y negro, la recorto para que los bordes destaquen, y la retoco en tonalidad y brillo con un programa determinado. Luego estos datos demuestran que la fotografía original que me facilitó Miguel Navas Palma es la sepia y la otra la que publico en este blog y está retocada por mí, es la copiada en la Página de Facebook referida a Córdoba y citada anteriormente, en una muy alta aproximación. Por lo tanto está, presuntamente, extraída de este blog, al que tampoco cita la persona que la publica. ¿Tan complicado es citar las procedencias? 

Fotografías de este Blog facilitadas por Miguel Navas, otras de la página de búsqueda de Google y otra publicada en la página de Facebook "Cordoba Antigua (España)" sin citar la procedencia.

Bibliografía del Blog y Facebook