Ruta de Wikiloc, en el punto inferior el manantial
Hoy sábado hemos completado la búsqueda de la fuente que figura en las planimetrías del siglo XIX, 1872, en los terrenos del Cortijo de la Moheda. Demuestra su presencia la profesionalidad del trabajo de los topógrafos de esos años. Luego los errores que tiene el Raster del IGN, nos dejan ver la dejadez y falta de escrupulosidad de otros técnicos más contemporáneos. Nadie o muy pocos hacen trabajos de campo. Por poner un ejemplo que puede ser parecido; unos técnicos deben certificar una subvención que una autonomía determinada ha concedido para adaptar viviendas a cuestión aislamiento. ¿Cómo lo certifican? pues visitando la vivienda y comprobando que el importe de la subvención ha sido adecuadamente utilizado para el fin a que había sido destinado.
Pero qué hace la administración, en lugar de hacer la inspección con su funcionariado, contrata y externaliza a una empresa privada (no sabemos si amiga) para que lo haga ¿Y cómo actúa? Llama por teléfono al beneficiario, habla con él, le pide un documento, el permiso de obras que se suponen lo deben tener ellos en la documentación de la subvención, o la empresa instaladora pero lo piden, y unas fotos del trabajo. No inspecciona. Qué puede hacer el ciudadano, si es un pícaro y ha hecho trampa, seguir haciéndola, mandándoles un documento falso, y unas fotografías trucadas y ya está. Pero en ambas soluciones sea el ciudadano pícaro o sea honrado, la empresa se ahorra la visita, los emolumentos del técnico, dietas incluidas -si no es de la ciudad- y hacer un informe in situ.
Pues lo mismo con los planos, cortan y pegan y… bienaventurados mis imitadores porque de ellos serán mis defectos. Y así se van encadenando errores y errores, que luego nadie es capaz de enmendar. Por esa razón si alguien hace un trabajo, en el que debe situar un accidente patrimonial en un sitio determinado, en lugar de que un técnico corrobore la ubicación, si la ubicación está mal en el plano donde se mira, se copia el error, y la administración que paga, no comprueba quedándose con el error en su documento. No sé, pero si mañana existiese una denuncia, y ese informe debiera servir para dilucidar cualquier contencioso, lo primero que habría que hacer es gastar más dinero público para arreglar el error. Es posiblemente ir demasiado lejos en las suposiciones, más o menos como el chiste del gato, del automovilista pinchado a altas horas de la noche con tormenta y en el campo, sin gato para cambiar la rueda y su reacción gracias a sus preguntas y respuestas.
El manantial está donde dicen los planos de 1872, donde lo encontraron los topógrafos y reflejaron en el plano y, cosa curiosa, en los planos que yo uso, que es una extraordinaria planimetría y que recomiendo a todo el mundo, de mi amigo: http://javier.jimenezshaw.com/, y como se pueden superponer planos, se puede ver como coinciden exactamente con los actuales y los de diferentes vuelos. Allí estaba el manantial en las coordenadas: 38.1220507, -4,885632. El blanco de la fotografía aérea es la techumbre plástica de la alberca, construida en el rincón y vértice sur del aprisco derruido. Dentro de una caseta la alberca de unos seis metros de largo por cinco y algo de fachada, y uno y medio de profundidad, irregular, pues el ancho del fondo no supera los tres metros, y es dónde está la entrada de la mina de agua que alimenta la misma. La fachada tiene una ventana y de ese frontal principal que es la mitad de un muro de piedra mampuesta y el resto de ladrillo, salen unas tuberías de pvc, que sin conocer su destino, hay que imaginarse serán para uso de la cortijada. Pero cómo lo llamamos si no tiene nombre, en las planimetrias le llaman fuente agria, pero estimamos que se debería llamar "Manantial de la Moheda de las planimetrías de 1872"
La construcción romboidal que se ve en las distintas fotografías aéreas, que se supone fue un aprisco ganadero o incluso huerta, construido con cerca de piedra, está derruido casi en su totalidad, quedando sólo unos trozos en pie, me imagino que por poco tiempo, aunque los que vemos tengan la friolera por la parte más corta, según los vuelos, tres cuartos de siglo. En el vértice sur lado este, se mantiene el muro de piedra, y por el lado oeste tiene un cauce que parece artificial, posiblemente de desagüe en rebose de buenas temporadas, además de derivar el arroyo que cursa estacionalmente por la vertiente superior. La riqueza hídrica del lugar permite que el color de los verdes del lugar sean intensos, y una higuera unos metros más abajo brille exageradamente, ahora que están florecidas. En las fotografías aéreas se ven esas diferencias siempre, de exuberancia y color, puede presumirse el agua por el color de la vegetación. La naturaleza es muy agradecida y nos ofrece sus colores y brillos cuando se la trata bien.
Hemos visitado también el fin del sendero de Villaharta al Camino de los Pañeros o Pedrique, camino que en ese lugar ya es término de Pozoblanco. Y ahí mismo nace el arroyo de Pedrique que es la linde con el municipio de Obejo para luego desembocar en el Guadalbarbo, ya con categoría de río. Arriba del fin del sendero está el cerro de la Umbría de la Mimbre que comparte las ruinas de la Ermita de San Onofre, con cuatro cotas más todas superiores a los seiscientos metros, salvo el cerro de Pedrique con 708, todo de Pozoblanco también. En la vertiente opuesta está la Umbría del Huerto, con tres cotas por encima de los 600 m. estas están en el término municipal de Obejo. El cortafuego o camino casi vertical es la linde de Villaharta con Obejo. Mientras otros discurren paralelos a una cota determinada parece que construidos en la repoblación de los cincuenta, como puede verse en los vuelos de ese tiempo.
Camino de Pedrique, fin sendero y frente la Umbría del Huerto
Garganta del arroyo de Juan Rayo (de una foto de A Desalambrar)
Detrás de esa mole de la Umbría del Huerto está el paisaje más espectacular del territorio, los riscos de Juan Rayo el arroyo del mismo nombre, y la fuente que también situaba allí las planimetrías del siglo XIX, y ya que han revalidado su categoría topográfica, significa, de entrada, una garantía de encontrarla donde dicen. Otra cosa es que se pueda pasar a la misma por estar en un terreno privado. Aunque ¿Qué no es privado en nuestros campos? y no me estoy refiriendo a la lógica titularidad en la propiedad si no al paso por los mismos. Cientos de miles de metros cuadrados improductivos, destinados a los deportes cinegéticos, es decir a matar animales en una determinado época. Pero sin embargo dicen que hacen un servicio al medio ambiente, eso sí obviando la contaminación de plomo y plástico los campos.
Fotografías del autor A desalambrar y vuelos citados
Bibliografia de la planimetría de 1872.
Buenos días, no nos dejes en ascuas con el chiste del gato, que no lo recuerdo! 😉
ResponderEliminarUn Sr. pincha el coche en una carretera de esas que no pasa nadie. Son las dos de la madrugada y llueve a cantaros. Echa mano a cambiar la rueda y se da cuenta que le dejó el gato a su cuñado. Pero levanta la cabeza y ve a lo lejos una luz entre la lluvia y piensa: -¡Hombre un cortijo! Está algo lejos pero a lo mejor el hombre me puede prestar su gato. Empieza andar y se dice: -¡Pero a las horas que son un desconocido le pide el gato y va a sospechar el hombre algo! Sigue andando: -Aunque si el hombre está durmiendo y lo despierto pues se va a poner fatal. Sigue andando y ya está cerca de la casa: -Creo que este hombre después de haber subido al cortijo me va a decir que no me presta el gato. Llama a la puerta y contestan desde dentro: -¿Quién es? Y contesta él: -¡¡¡Sabe lo que le digo, que se meta el gato en los huevos!!!.
ResponderEliminarAcabo de leer tu entrada sobre la fuente de la zona del arroyo del Cañuelo y no sé qué decirte de esta. Simplemente espectacular. Un abrazo.
ResponderEliminarGracias RafaHell, y como te decía ayer decidimos bueno, ella me pregunta dónde vamos y aproveché para rematar. Debí hacerle caso y subir un poco más anteayer pero el terreno es muy malo la hierba está alta, y debajo hay un terreno que ha estado arado, por lo que tiene unos huecos que en un momento dado te jode un tobillo. Y claro tienes que ir con mucho cuidado y lo peor la bronca continuada por habernos metido por ahí. Un fuerte abrazo.
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