jueves, 26 de septiembre de 2019

VIADUCTO DE LA ELECTRO MECÁNICAS

El viaducto de la Electro Mecánicas

Los aficionados a la bicicleta sabíamos que cuando queríamos ir por la carretera de Palma del Río era indispensable subir el Viaducto de la Electro y andar por el temido “pavés”, adoquín similar al que veíamos en las carreteras de Bélgica y Francia, en las carreras ciclistas clásicas. Hasta que no pasabas la Venta de San Francisco con sus enormes eucaliptus en la puerta, no empezaba la tranquilidad del piso alquitranado, que no dejaba de ser otro problema por el mal bacheado, pero por lo menos no era adoquín y las muñecas amortiguadoras dejaban de sufrir.

Panorámica aérea

Detalle aéreo del Viaducto

El viaducto de la Electro Mecánicas era también el paso de muchos cientos de trabajadores de la fábrica por excelencia, que diariamente iban a la misma en bicicleta, salvo aquel que tenía algo de más poder económico e iba al trabajo en un Mosquito (bicicleta con motor en la rueda delantera), una Mobilette o una motocicleta de más cilindrada, Guzzi, Lube, etc.. Predominaba de todas maneras la bicicleta. El viaducto hacia una zeta con subida y bajadas pronunciadas con árboles en los bordes de la carretera. 

Vuelo de 1956 de la USAF de la zona

Cecilia, un habitante de la torre de la mezquita, pariente de Soriano el campanero de la mezquita (ambos trabajadores de la fábrica), tuvo en ese viaducto un gravísimo accidente con la moto, rompiendo, dijeron, con la cabeza la caja de herramientas de un camión. Fue muy sonado aquello en el barrio de la Judería, afortunadamente su juventud permitió que saliese adelante. El viaducto por su estructura, estrechez, piso y curvas cerradas era bastante peligroso para la circulación. Abajo lo que se llamaba Esquina Paradas, un paso a nivel bastante ocupado, un quiosco, y la entrada al mencionado hospital y cruce de caminos.

Momento del derribo 2004 (ignoro el autor)

Un moderno y sinuoso viaducto ocupa hoy en día el lugar, metro arriba metro abajo, que ocupaba el de la Electro, lo que ocurre es que en dirección norte. Debajo sigue la playa de vías del ferrocarril que antes también había. Paralelo a la “Residencia”, había un camino que nos llevaba a la carretera de Trassierra, junto a las casitas del Patronato de San Rafael. Antes, a la izquierda, detrás de la “Residencia” estaba la Huerta de los Mudos, con su alberca para mujeres y niños, donde más de una ocasión me llevó mi tía Carmela que era criada de una familia en la calle Ximénez de Quesada, porque allí llevaba a los niños de "sus señoritos" y de paso a su sobrino. Otro camino en diagonal iba a la Colonia de la Paz y Barrio de Maria Luisa. Por allí también bajaba el Arroyo del Moro, en uno de sus desplazamientos urbanos. En sus alrededores había una alberca califal.

Cúpula de la "residencia"

La inmensa mole de la llamada "Residencia", primer gran hospital de la Seguridad Social en Córdoba, llevaba el nombre de un Teniente Coronel, Carlos Noreña, que no quiso incorporarse al ejército de la II República, manifestando su adhesión por los golpistas, por lo que fue fusilado. Comenzó a construirse en 1950, se terminó en 1957, dejó de funcionar en 1983 y se derribó en 2004, 21 años después de dejar de ser útil. Su arquitecto fue Juan de Zavala y Lafora. La verdad es que significó bastante en la sanidad cordobesa, muchos cordobeses nacieron allí, muchos se curaron de sus enfermedades y muchos murieron también. El ciclo completo de la vida. 

Fachada principal del Silo

Una de las dos estrellas de David que coronan el Silo

Dos enormes edificios cordobeses, formaban parte de horizonte visual desde arriba del Viaducto de la Electro Mecánicas, la citada Residencia de la Seguridad Social y el Silo del Servicio Nacional del Trigo. Luego alrededor fueron surgiendo barrios y hoy son un recuerdo de una época que aparentemente está muy lejos. Una época que hemos vivido, que la vemos desde la nostalgia, pero que a muchos no nos gustaría volver a vivir. Es cierto que no se pueden borrar los recuerdos pero si se pueden encerrar en el baúl correspondiente.

Fotografías del autor y de Internet lamentando desconocer autores
Bibliografía del Blog y de Cordobapedia

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