Portada del libro
El jueves 13 de marzo tuvo lugar en el Teatro Góngora un emotivo acto, durante el cual se presentó un libro, “Electromecánicas, El cobre que unió vidas”, auspiciado por la Delegación de Participación Ciudadana del Ayuntamiento de Córdoba, y la Delegación de Presidencia/Archivo Municipal, editado por el Ayuntamiento de Córdoba, que contiene un estudio Sociológico, con entrevistas, realizadas por Pedro Pascual Lindes, con realización técnica y fotográfica de Bartolomé Olivares Dobao, Coordinación y gestión de Ana Verdú Peral, y maquetación y diseño de Paco Casado. A la misma vez se homenajearon a un nutrido grupo de trabajadoras y trabajadores de la fábrica Electromecánicas, cuyas vidas formaron parte de esa industria.
Presentó el acto María Eugenia Vílchez, periodista de raza, que explico el contenido del acto. Lo abrió la Alcaldesa de Córdoba, Isabel Ambrosio, glosando a un barrio y unas gentes que forman parte de la historia de la ciudad. Aunque haya quedado un sabor amargo por los intereses del capitalismo, que no tiene reparos a la hora de decidir dónde, y dónde no, se quedan las industrias y en que ciudades, sin importarle nada éstas y sus habitantes, sólo su cuenta de resultados. Así es y así ha sido siempre y creo lamentablemente que será. Otros ensayos de control, en otras latitudes, por parte de los poderes públicos y el supuesto interés general, no han sido muy satisfactorios, dado el ejemplo de desmantelamiento de grandes complejos industriales, de naciones y el crecimiento desmesurado de enormes fortunas de la nada.
Pero la realidad de este acto es homenajear a una gente, que tuvieron su dorado en un momento de la historia, pasando de la miseria a vivir medianamente, tutelados eso si por el paternalismo interesado siempre, de la empresa. A tener escuelas, médicos, economato, e incluso, para no perder la perspectiva hasta un cuartelillo de la Guardia Civil que, con su presencia y servicio de siempre al poder, marcaba los límites. Luego estuvo la guerra incivil y la sangría que hizo el fascismo entre la plantilla, con los cientos de fusilados y torturados que engrosaron la lista de represaliados, simplemente para asentar el terror del Estado. Evidentemente la lista de represaliados, se justificaba con la de los delatores y chivatos, por lo que no todo el monte era orégano. Después, muchos años después, el resurgimiento de las tímidas libertades, tanto políticas como sindicales, la lucha trabajadora, para caer nuevamente, en una línea de tiempo diente de sierra.
Un diploma de recuerdo, a una serie de personas del barrio, y otras que, supongo, sin serlo habrían contribuido con alguna aportación al hecho concreto. Hay quien dejó caer, que aquello parecía un acto electoral, es posible, pero hay que tener en cuenta qué ¿cuándo no es período electoral en este país?. Encontrar un hueco para hacer algo sin coincidir con algún proceso es materialmente imposible. De todas maneras que más da, si el fondo es lo que merece la pena. Simplemente por el mero hecho de ver personas mayores, satisfechas con su diploma de reconocimiento a su vida, ya es suficiente. Y así fue y así se pudo ver en la foto de familia, con un escenario lleno de trabajadores y trabajadoras que lo fueron y vecinos de una barriada envidiada, porque rompía con la forma de vida habitual de los barrios de la ciudad, de retretes compartidos, sin agua corriente y habitaciones convertidas en dos con cortinas.
Después la presentación del libro “Electromecánicas, El Cobre que unió vidas”, con una introducción a cargo del sociólogo Pedro Pascual Lindes, que recorrió la gestación del mismo y lo desglosó en números fríos, pero que cada uno de ellos encierra lo que catalogaron como “Donaciones de Memoria", para que esos testimonios de vida no se pierdan en el olvido, y queden para siempre en la Casa de la Memoria de la ciudad que es el Archivo Histórico Municipal. Un importante trabajo cuyo listado de créditos -así se llama ahora, antes le llamábamos reparto-, ya está reflejado en el primer párrafo de esta entrada. Hay que considerar que es un notable esfuerzo de todos, principalmente de las instituciones públicas que aportan la posibilidad económica de llevar el proyecto a buen puerto.
Después la Mesa Redonda. Coordinada por Rafael Morales y compuesta por personas relacionadas con la fábrica y el movimiento ciudadano. Dos mujeres y cuatro hombres. Pepe Balmón, luchador donde los haya, preso político injusto, según todos y escarmiento del sistema por que molestaba. Pero a pesar de lo sufrido, ni a los muchos años de tortura, no renunció en ningún momento a proclamarse con orgullo comunista, pero comunista, no de partido sino de convicción. Paco Pozuelo, sindicalista, al que le tocó el episodio más triste de lo que quedaba de la fábrica, el cierre, que glosó, entre otras cosas, la memoria de otro trabajador al que el fascismo le causó la pérdida de un ojo.
Conchi Sánchez persona del movimiento ciudadano que también se despachó a gusto. Marina Redondo, mujer trabajadora del staff directivo o lo que llamaban empleados, para dividir a la clase trabajadora, que expuso su lucha personal como mujer, en un mundo de hombres. Paco Ferrero, sindicalista de siempre, que se emocionó recordando a Garcés, único diputado de la II República que fue trabajador de la fábrica y asesinado en el momento del golpe de estado fascista. Y Rafael Morales que también dejó caer su sentir y trayectoria personal.
En conjunto, la mesa fue un altavoz reivindicativo de un pasado, de lucha de la clase trabajadora y de un presente oscuro, que nos dibuja un futuro incierto. Menos mal que el barrio, o los barrios que pertenecían a la fábrica, no los han desmantelado como la industria, afortunadamente. He procurado hacer unos vídeos que son retazos de las intervenciones, por lo que son cortos la mayoría y no las recogen en su totalidad. Por otro lado están los audios de todo el acto, sin procesar, para aquel que tenga la paciencia de escucharlos, podrá comprobar lo dicho respecto a la Mesa Redonda, en la que se dijeron cosas que no se deben olvidar nunca. De todas maneras conozco personas de la fábrica, cuya deriva política deja mucho que desear y en los que la memoria no ha parecido tener mucha incidencia, pero ya se sabe aquello de "en la viña del señor". En conjunto un notable para la organización.
VIDEOS
ACTO "DONANTES DE MEMORIA"
Alcaldesa de Córdoba
María Eugenia Vilchez
Pedro Pascual Lindes
Entrega Diplomas
Mesa Redonda
Mesa Redonda Rafa Morales
Pepe Balmón
Paco Pozuelo
Conchi Sánchez
Marina Redondo
Paco Ferrero
Pedro Pascual Lindes
Entrega Diplomas
Mesa Redonda
Mesa Redonda Rafa Morales
Pepe Balmón
Paco Pozuelo
Conchi Sánchez
Marina Redondo
Paco Ferrero
AUDIOS DEL ACTO "DONANTES DE LA MEMORIA"
Alcaldesa de Córdoba
Diplomas entrega
Pedro Pascual Lindes
María Eugenia Vilches
Mesa Redonda 1
Mesa redonda 2
Fotos, vídeos y audio del autor.Alcaldesa de Córdoba
Diplomas entrega
Pedro Pascual Lindes
María Eugenia Vilches
Mesa Redonda 1
Mesa redonda 2
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