BLAS DE LEZO

Blas de Lezo en el Paseo Marítimo de Torre del Mar

El sábado pasado presenciamos la preparación (antes) e inauguración de un monumento en el Paseo Marítimo de Torre del Mar (Málaga), a un marino español, vasco por más señas, Blas de Lezo. Creo que es el cuarto monumento que tiene este marino, entre España y América. En una entrada relativa a los bombardeos por la escuadra golpista de la incivil guerra, de los huidos por la carretera Málaga-Almería, comentaba que en febrero de 1937, en el mismo lugar, de la bahía de Torre del Mar. otro marino español, este muy español y mucho español, Salvador Moreno Fernández, se cubrió de gloria asesinando a miles de españoles, peligrosos enemigos de su patria, mujeres, niños y ancianos. Así se llamaba el criminal comandante del crucero Canarias, paisano del General Franco, que luego en virtud de sus heroicidades -número de muescas en la culata de su pistola, o en este caso en los cañones de su barco-, fue nombrado Ministro de Marina.

Blas de Lezo pintura en el Museo Naval

El otro marino que nos ocupa, que seguro también habrá acabado con la vida de muchas personas en su momento, siempre "seguro en defensa de la patria y sus intereses", es: "Blas de Lazo y Olavarrieta, Guipúzcoa/Cartagena de indias. 1741) fue un marino y almirante español que está considerado como un, de tos mejores estrategas de la historia de la Armada Española, y cuyo "bautismo de sangre'", donde a causa de una bala de cañón perdió la pierna izquierda, se produjo en la 'Batalla Naval de Vélez-Málaga", el 24 de agosto de 1704. Su familia, proveniente de la pequeña nobleza guipuzcoana. Estuvo vinculada a la actividad marítima. Se educó en un colegio trances y, al llegar a la adolescencia y animado por su familia, en 1702 ingresaría en la Armada Francesa, en cardad de guardia marina al servicio del conde de Toulouse.

Batalla de Málaga 1704, Museo Naval

Tras la batalla de Vélez-Málaga, fue condecorado por Luis XIV por su comportamiento y valor, alcanzando entonces la categoría de alférez de bajel de alto bordo, y el propio Felipe V le otorgó una merced de hábito. Con posterioridad, y en una acción contra los barcos de la Armada de Saboya. será herido en su ojo izquierdo, lo que le llevaría a perder por completo la visión del mismo Sin haber alcanzado aún los treinta años de edad, ya había perdido un ojo. Estaba cojo y también manco. Siendo entonces cuando se te comienza a conocer con el apodo de "medio hombre". Convirtiéndose ya en un auténtico mito y un ejemplo de superación personal, al hacer frente a todo este tipo de adversidades. Pese a todos los reveses, su carrera en la marina continuó imparable As¡. en 1720 fue nombrado capitán del buque Nuestra Señora del Pilar cuyo cometido, en el Perú, era el de acabar con los ataques de los piratas y corsarios que se estaban produciendo en el Pacifico Sur Durante dicha misión, sería nombrado también general de la Armada y jefe de la Escuadra del Mar del Sur en 1723. Poco tiempo después, en la capital andina, conocerla a la que se acabaría convirtiendo en su esposa, Josefa Pacheco de Bustos.

Más favorecido, monumento en Madrid

En 1730, y ya con destino en la ciudad de Cádiz, es nombrado jefe de la Escuadra del Mediterráneo, Pasando a unirse, posteriormente, a la expedición española que con el objetivo de recuperar la ciudad argelina de Orán, encabezaba Francisco Cometo Debido a sus éxitos en todas estas contiendas, siguió ascendiendo y fue nombrado Teniente general de la Armada, teniendo destino en El Puerto de Santa María (Cádiz), encargándose del control de todo el comercio español con las colonias americanas. Pero, sin duda alguna, su acción más destacada fue la que protagonizó junto con el virrey Sebastián de Eslava, en la defensa de Cartagena de Indias durante el asedio británico de 1741, que contaba con una flota de dos mil cañones dispuestos en casi ciento ochenta barcos. El fracaso supuso graves pérdidas materiales y humanas, que obligó al gobierno británico a concentrar sus fuerzas en la defensa de la metrópoli y sus intereses en el Atlántico Norte y el Mediterráneo, desechando para siempre nuevas campaña en las colonias españolas de América."

 Paneles del monumento

El 24 de agosto de 1704, "a la vista de Vélez-Málaga, en la bahía de Torre del Mar", se produjo una batalla naval de enormes dimensiones, considerada unánimemente por los historiadores como la más importante de la Guerra de Sucesión Española 1701-1713. Fue un combate de gran transcendencia, en el que se puso en juego la posesión de la roca de Gibraltar -llave del estrecho y dominio del Mediterráneo-, que habla sido tomada por los ingleses, en un golpe de fuerza, veinte días antes, el 4 de agosto. La armada Franco-española (96 barcos. 3 626 cañones y 24.277 hombres), fue mandada por Luis I, Alejandro de Borbón -Conde de Tolosa, almirante de Francia e hijo natural de Luis IV de Francia- ¬que se enfrentó al almirante inglés Sir George Rook, que comandaba a la armada anglo-holandesa (68 barcos, 3.596 cañones y 22.543 hombres) en el último gran combate de escuadras, de viejo estilo, de la historia. Conocida como "Batalla Naval de Málaga", en parte por la costumbre de dar a estos acontecimientos bélicos el nombre de la ciudad más principal cercana a la ubicación real, y en parte porque Los holandeses llamaban a Vélez-Málaga "la vieja Málaga", en tos siglos siguientes fue confundida la información sobre su emplazamiento, fecha, características y resultado; elementos que, definitivamente, han sido clarificados entrado ya el siglo XXI.

Las heridas de Blas de Lezo

El enfrentamiento se produce cuando la armada anglo-holandesa -defensora del pretendiente Archiduque Carlos de Austria- se adentra en aguas malagueñas. a donde acababa de llegar la armada francesa, que navegaba por el levante español en defensa del pretendiente francés Felipe de Anjou El resultado de la batalla fue nulo, con éxito estratégico para los ingleses, que salvaron Gibraltar. Este combate constituye uno de los momentos bélicos más relevantes del gran conflicto sucesorio español. Batalla calificada por el especialista del tema Henry Kamen, como "la batalla naval más importante de la guerra"; pero, además, se puede afirmar, con seguridad, que no sólo fue la más importante de las celebradas durante la Guerra de Sucesión Española, sino que, por lo que respecta a las aguas malagueñas, ha sido la más importante de todos los tiempos."

Fotos del autor Museo Naval e Internet

Bibliografía de los paneles informativos