CORDOBA LUCIENTE EN SUS FUNDACIONES Y MUSEOS (I) (SALA VIMCORSA)

"SALA VIMCORSA

CENTRO DE ARTE "RAFAEL BOTÍ"

SALA CAJASUR-GRAN CAPITÁN

Exposición organizada por la Fundación Viana (CajaSur Banco y Diputación de Córdoba), integrada fundamentalmente por fondos de ambas instituciones y de la Fundación Provincial de Artes Plásticas Rafael Botí, con representación de obras procedentes de los más importantes museos de Córdoba y provincia, a través de la cual se ha pretendido vertebrar un selectivo recorrido por las artes plásticas que se han venido gestando en el territorio desde el siglo XVII hasta nuestros días.

Para poder mostrar tan amplio itinerario, que abarca un ámbito temporal de más de cuatro siglos -y para acoger las ochenta y cuatro obras que integran la muestra-, ha sido preciso disponer tres complementarios espacios para su exhibición: la Sala Vimcorsa, el recientemente inaugurado Centro de Arte Rafael Botí y la Sala CajaSur-Gran Capitán, en los que la presencia y distribución de estos excepcionales trabajos artísticos ha obedecido a pautas temporales y estilísticas diferenciadas.

Procedentes de los fondos con que cuentan las instituciones organizadoras, se han seleccionado a los autores cordobeses más reconocidos a lo largo de estos cuatro siglos en el ámbito de las artes, a cuyo desarrollo y despliegue contribuyeron con sus aportaciones en el devenir de las centurias, y a aquéllos otros que desarrollaron su actividad profesional vinculados a esta ciudad, así como un selectivo acopio de trabajos que como consecuencia del mecenazgo han quedado incorporados a las colecciones cordobesas. Una aproximación cualitativa, en suma, para iniciara¡ espectador en la amplia oferta cultural existente en el territorio.

Con el título de la exposición, "Córdoba Luciente", rendimos homenaje a su mayor poeta, D. Luis de Góngora, máxima expresión de la lírica barroca, quien a través de sus versos -donde fulge poderoso el esplendor de esta tierra, en expresiones de centelleante riqueza- supo recrear una Córdoba eterna que ha perdurado en la memoria colectiva, y que ahora pretende mostrarse convenientemente engalanada a través de sus más destacados recursos patrimoniales, mediante el despliegue de las obras más preclaras que atesora.

Miguel Clementson Lope"

"SIGLO XVII

El XVII ha sido designado como el Siglo de Oro de la pintura española. La actividad de estos pintores va ligada fundamentalmente a lo devocional, donde en ciertos artistas se evidencia la intensidad con que se expresa el fervor contrarreformista.

En la primera mitad del siglo XVII se perciben reminiscencias de lo que se denomina epígono manierista, de influencia directa italiana, para dar paso seguidamente a secuencias de naturaleza tenebrista. La segunda mitad del siglo XVII se caracteriza por la difusión de modelos que entroncan con el quehacer rubeniano, cuya exuberancia, dinamismo y nuevo sentido cromático modificarán en gran medida el horizonte artístico español, que mutará del tenebrismo al colorido teatral del pleno barroco, impregnado igualmente del sentido triunfal y grandioso de la pintura decorativa de Pietro de Cortona o Giordano, que contrasta paradójicamente con la dura realidad de la decadencia dinástica de los austrias.

Las obras aquí expuestas de autores como Pantoja de la Cruz y de Jan Brueghel el joven aún traslucen la estética de fines del Renacimiento italiano, mientras que a través de las representaciones de pintores como Valdés Leal o Luca Giordano se accede plenamente al Barroco, cuyas obras tendremos ocasión de confrontar con las de sus coetáneos flamencos, italianos o cordobeses igualmente representados en la exposición, destacando entre estos últimos el lienzo de Antonio del Castillo."

 

 

 

 

"SIGLO XVIII

Del siglo XVIII se muestran trabajos de Acisclo A. Palomino y de José Ignacio del Cobo y Guzmán, que continúan atendiendo las exitosas fórmulas del Barroco tradicional, con despliegue de un más rutilante colorido, y de Miguel J. Meléndez de Ribera, donde pueden evidenciarse ya los cambios en el gusto introducidos por la nueva dinastía borbónica, al propiciar la venida de pintores franceses e italianos.

El horizonte artístico español del siglo XVIII culmina con la desgarrada personalidad de Francisco de Goya, cuya obra de madurez supondrá la apertura de nuevas vías de introspección argumental que tendrán enorme trascendencia para la evolución de la pintura en el siglo XIX, y aún en el XX.

El gusto estético se va transformando al amparo de una incipiente burguesía acomodada, y con la creación de la Academia de Bellas Artes de San Fernando de Madrid, en 1752, que se convertirá en epicentro difusor del patrón neoclásico."

 

 

"SIGLO XIX

En el Romanticismo se otorgará gran protagonismo al yo individual y al sentimiento, que llegará a ser considerado auténtico vehículo de conocimiento; se exalta el amor a la naturaleza, capaz de suscitar emociones que trascienden la razón -lo sublime-, y se liberan las pasiones, creyéndose encontrar todo cuanto existe en el viaje al interior de la conciencia.

Frente al subjetivismo romántico, a partir de la segunda mitad del XIX muchos artistas acentuarán su apego respecto a la realidad circundante, confirmando su interés por lo objetivo, y derivando su atención hacia el paisaje, la estimación de temáticas sociales o populares, y por el retrato, claro manifiesto de la ilación existente entre estos autores y el positivismo filosófico y científico del momento.

Como referencia testimonial de la pluralidad de lenguajes que conviven en el siglo XIX, se disponen en la presente muestra composiciones representativas del neoclasicismo-el Retrato del escultor Álvarez Cubero, de Juan Antonio de Rivera-, del romanticismo-el Autorretrato del Duque de Rivas-, del realismo, del simbolismo y del modernismo, que aún solapó su presencia hasta fines de la primera década del XX.

En esta panorámica decimonónica, al margen de lo anteriormente reseñado, destacan las obras de Tomás Muñoz Lucena, Joaquín Sorolla, Ángel Díaz Huertas, José Garnelo, Adolfo Lozano Sidro y Mateo Inurria; pero adquiere máxima relevancia la presencia de una saga familiar tan determinante para el desarrollo del arte en Córdoba como lo fue la de Rafael Romero Barros y sus hijos, los laureados pintores Rafael y Julio Romero de Torres."

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

C/. Ángel de Saavedra, 9 - Teléf. 957 477 711 HORARIO: de lunes a sábado, de 10:30 a 13:30 h. y de 17:30 a 20:30 h. domingos y festivos: de 10 a 14 h.

CORDOBA LUCIENTE EN SUS FUNDACIONES Y MUSEOS (II) (SALA CAJASUR)
CORDOBA LUCIENTE EN SUS FUNDACIONES Y MUSEOS (III) (C. ARTE "RAFAEL BOTI")

Fotos del autor

Textos de la exposición