sábado, 29 de marzo de 2014

LA FUENTE DEL ELEFANTE EN EL POLJÉ DE ESCARABITA (II)

La Fuente del Elefante

Ayer visité la fuente del Elefante. El día de antes me dañé un pie en otra salida pero para darle castigo decidí salir. Luego me llamó un amigo y se incorporó a la visita, él nunca había estado allí, yo hacía algunos años. Me llamó la atención el despliegue de la Benemérita por la zona, cuatro o cinco todo terreno o el mismo dando vueltas por el mismo sitio como los tanques del remedo del Golpe de Estado de Évole. No pregunté desde luego que pasaba, seguro buscarían a un antisistema. 

La conducción de agua

Hacía tiempo que no visitaba el lugar, en él una réplica de la famosa escultura zoomorfa, dicen que es un elefante pero tiene mezcla de jabalí, y agua, tanta que se derrama por rotura de la canalización. El lugar es citado como dónde hubo una finca de recreo de los califas cordobeses, que muchos años después, fue propiedad de la Iglesia. ¡Ay la Iglesia! siempre enmedio. Sí no, no se entiende que la propiedad del original del elefante esté en el Museo Diocesano. Sería suyo o lo inmatricularían para hacerlo suyo con la modificación de la Ley hipotecaria de Fernando III.

La pérdida de agua de la conducción

El lugar es maravilloso, y mucho más en primavera, que dicho sea de paso está insultante. Menos mal. Un gracioso ha borrado el uno del cartel indicador y lo que señala cuatrocientos metros serían mil cuatrocientos, pero tampoco. Claro la percepción natural o GPS mental te dice que llevas mucho rato andando para cuatrocientos metros. 

Descripción del lugar

Lo importante es el lugar, afortunadamente recuperado, esperemos que respetado. Lo llamativo es pensar que el imperio romano, hace más de dos mil años, pensaran que ese agua era necesario llevarla a Córdoba para abastecerla. Y que si miras en el pozo ves como la conducción se pierde en dirección sur debajo del polje. Seguro que no procede decir que es un poljé, pero es una depresión del terreno ligada siempre al agua, un ejemplo claro son la Nava de Cabra o Navalagrulla, más cercano y pequeño.

Una vista del lugar

El verdadero nivel del llano de Escarabita, está más bajo del que vemos, por la sedimentación. El nivel freático a flor de piel se traducía y aún continúa, en esa gran surgencia de agua que la clara y práctica mirada del imperio pensó utilizar para alimentar a la capital de la Bética. Luego su utilización árabe, dicen que en una finca de recreo de los califas cordobeses en el lugar, de la que no queda rastro, a la vez que el agua para Medina Azahara.


El trasero del elefante

La técnica del carbono 14, aplicada a la zoomorfa figura de elefante sirio, pequeño y rechoncho, data que su construcción fue entre el 982 y 1193, fechas del auge de la ciudad palatina y próximas a la conquista castellana. Luego el abandono y hasta hace pocos años su estudio y puesta en valor, que es de agradecer. Es un gozo para los sentidos el lugar y merece la pena visitarlo.

Caño de la fuente, al fondo el poljé de Escarabita

Como llegar. Creo que es obvio pues todos los cordobeses conocen o deben conocer el sitio, pero llegando a la Barriada de Trassierra, dónde una imagen católica preside una esquina, en el desvío por la derecha para los Baños de Popea, a 880 mts. hay un cruce que nos lleva al Bejarano, desde ese cruce hasta la entrada del camino unos 351 mts. más. Hasta aquí para los poco andadores puede llegar el coche. Está señalizado, y además alterado el indicador erróneamente, pues la realidad hasta la fuente son 1025 mts. Si seguimos 604 mts. más llegaremos al cruce del Cortijo del Caño, pero eso para otro día.

Pozo inicio del acueducto 

Para que veamos el desarrollo de cómo está el lugar, dos fotografías aéreas, una del vuelo de los USA de 1956 (es un elemento de consulta extraordinario, no fue malo todo lo que hizo esta gente) y otra de 2010 de Google, sólo de la nava o el poljé de Escarabita. En la de 1956 se puede ver la virginidad del campo, en la actual la mancillación de las parcelaciones. Hay que reconocer lo horroroso del destrozo y, menos mal, que el "sosio" del cura no llevó a feliz (para sus arcas) término, su proyecto de Popea. Alrededor de la fuente podemos ver la vegetación y restos de construcción, a pesar de que en la loma más al norte está lo que fue el cortijo, del que sólo queda una casilla. Cuando vemos el antes y después comprendemos el daño que le hacemos a la naturaleza.

Fotografía aérea del vuelo de 1956

Fotografía de Google del año 2010




Fotos y vídeo del autor y Google.
Bibliografía variada.

sábado, 15 de marzo de 2014

LA ALBERCA DE LA HUERTA DE SANTA MARÍA DE LAS AGUAS DEL CABILDO

Plano de 1752

En el mes de enero publique, una incompleta entrada en este mismo Blog, sobre la Huerta de Hierro y las Aguas del Cabildo, pero como siempre -me ha pasado más de una vez-, no encontré el punto de partida de esas aguas en la Huerta de Santa María. Si recorrí la Huerta del Carmen, Matamilanos, o esa otra de nombre tan sugerente como Quitapesares, a modo de filtro de amores imposibles. Todos esos toponímicos de las antiguas huertas de la zona que, lamentablemente, no podía ser de otra manera quedaran, más pronto que tarde, solo en la memoria de cuatro nostálgicos, por mor de la criminal piqueta, que ha destruido mucho territorio, por no decir todo.

Plano catastral del sector 1950

Árboles centenarios desaparecidos, exageradas y mortales heridas a la tierra, para extraer sus ancestrales piedras, cambio de curso de arroyos, ruptura total con el paisaje, etc. etc. De momento el toponímico del Carmen y Pretorio, encabezan los Planes Urbanísticos. El primero que es el que nos ocupa, ha sido menos agresivo que el del Pretorio, como puede verse en las fotografías de la entrada anterior, en la que ha pasado a mejor, quizás peor vida, la Vereda de la Cuesta de la Traición en su tramo que circulaba por las cercanías de las de Segovia y Poderoso, habiendo dejado  atrás la Huerta de Hierro.

Aérea actual antes de la agresión

Lo que puede, o ha sido, pan para hoy y miseria para el mañana, que es hoy ya, el ladrillo, creador de inmorales fortunas y posteriores desdichas, por haber sido el monocultivo de este país y sus torpes -lo dejaré en esto solamente- gestores, tiene parada la citada agresión paisajística y a la historia, seguro que por dinero. ¿Si se están cargando la clase media de este país, quiénes les van a comprar el producto? ¿Seguro que si lo terminan, que lo dudo, será un fondo buitre, o nuevos millonarios rusos o chinos, antes paradójicamente comunistas? ¿No es este, verdaderamente, un mundo extraño y loco?

Vuelo de 1956

Pero aún siendo importante la crítica por el destrozo, y el futuro incierto, motivo suficiente para esta entrada, para mí es una satisfacción, porque gracias al comentario a Emilio -otro inquieto cordobés- visitamos la fuente principal de esas aguas. Cuando estuve en la zona de hermosos bancales solo, no llegué al lugar por haber entrado en ella por el inadecuado. Quise acceder desde el olivar de Vilanillo o Matamilanos, por la linde de Quitapesares y el zarzal del arroyo me lo impidió. Sin embargo cuando le di a Emilio la referencia de lo que buscaba, se acordó de haberlo visto y nos llevó directamente allí. Yo le había ya preguntado ya a Pancho Gamero, que me había corroborado la existencia de la alberca del plano de 1752. Emilio venía con Luis de "esparraguerar" por encima de la Huerta de los Dolores o Mirador de Cruz Conde.

Restos de la conducción en el camino

Después de pateado el sitio diré que, el acceso, con las oportunas precauciones, se puede hacer desde la carretera, frente a la entrada del Colegio Público de la Aduana, antiguo Noviciado de la Cía. de Jesús, o fábrica de curas como se la denominaba popularmente, por un caminillo que hay en la misma curva y que nos lleva a la plataforma, donde también existe un transformador. En esa misma curva existe también entre la maleza, una pequeña alberca o presa de retención del arroyo que cruza la carretera.

Fachada de poniente de la alberca, se ven la trampilla el tubo y cuatro caños

O por el contrario se puede seguir el camino de acceso por los bancales, bien siguiendo la conducción primitiva que va por el camino, pero que al cruzar la puerta, cuyas jambas están en pie y a mí se me antojan las del plano de 1752, aunque no las sean. Este terreno tengo entendido que lo está trabajando otra amiga, extraordinaria profesional de la arqueología, y espero que cuando termine su trabajo nos dé luz de cómo era la conducción o cualquier otro vestigio que contengan los terrenos. Una vez llegado al lugar una escalera artificial no lleva a la alberca, y allí la podemos ver igual que en el grabado (es verdad que echando algo de imaginación) con sus cinco caños.

Plataforma superior

La alberca tiene una orientación este oeste, teniendo su pared mayor, la de los caños, en su lado de poniente. Esta pared tiene unos tres metros de altura, o quizás más, siendo las laterales de mayor a menor. Una higuera ocupa la misma y otro tipo de vegetación, estando colmatada. Debajo de los caños existe una puerta metálica de acceso y un enorme tubo para la salida de las aguas. El sonido del agua amenizó el rato que estuvimos allí pero no pudimos, pudimos es un decir, no pudieron Emilio y Luis verlo por el enorme zarzal. Trozos de la pared de la albarca están desparramados por los alrededores.

Un caño

La tesis doctoral "EL ABASTECIMIENTO DE AGUA A CÓRDOBA" de la Dra. Guadalupe Pizarro Berenjena, es hoy, por lo menos para mí respecto a las aguas de la ciudad, como lo fue el libro de López Amo, guardando las distancias intelectuales, o el de Urbanismo de Verdugo y Martín, incluyendo también el de los arroyos de Carrasco, una verdadera joya de consulta de momento insuperable, para el tema del agua, en conjunto, en esta ciudad. No quiero olvidar citar los comentarios de mi amigo Pacho Gamero, en la entrada anterior, relativa a estas aguas que, son un excelente complemento a nivel del mismo estudio, y la revalorizaron, siempre digo que los comentarios son lo mejor de las entradas en el blog.

Otro caño

Por esa razón y para evitar mis elucubraciones citaré textualmente su capítulo: 

"6.11.3 El Qanat de la Huerta de Santa María

En el siglo XVII el Cabildo Eclesiástico, propietario de las huertas de Santa Maria y el Hierro, construyó una conducción con la que transportó las aguas que nacían en dichas propiedades hasta Córdoba: las Aguas del Cabildo Eclesiástico (CASTAÑO, 1978). En el archivo catedralicio se conserva un manuscrito fechado de 1752 que las describe, el cual va acompañado de un plano con el que podemos reconstruir su recorrido completo (ACC, Ms. 165. Todas las citas entrecomilladas se han extraído de este manuscrito.). Sobre su nacimiento, el texto indica que 


Otro caño

"En la Guerta de Santa María, como quatro millas de la Ciudad de Córdova, en lo más alto del piso contiguo a la cassa, esta el depósito, en una cortadura que naturaleza hizo artifiziosa, en cuio centro formaba vobeda de fornida arquitectura la haze parezer hermosa a la bista, aquí nazen, siendo tanta su abundanzia, que de los desperdizios de sus sobras se enriqueze un estanco de treinta Varas de diámetro (= 25 m), que haze más fértil y estimada la dicha posesión" 

Todo hace pensar que el manantial principal había servido en origen para el riego de la Huerta de Santa María, de 100 aranzadas de extensión (NIETO, 1976-1977: 129).


Otro

El nombre de la huerta, Santa María, liga a la conducción con la Catedral, que tuvo esa mismísima advocación. De hecho, A. López Ontiveros, quien analizó la información contenida en el "Libro de Diezmos de Donadíos de la Catedral de Córdoba" concluyó que en el repartimiento posterior a la Conquista Cristiana, "con viñas y huertas fueron especialmente dotados la Catedral de Córdoba y su obispo" (LÓPEZ ONTIVEROS 1970 14)

y el quinto

Aun cuando no disponemos de información sobre las propiedades que había al este de la ciudad en 1236, ¿pudo ser la de Santa María fuera una de aquellas huertas de los habices mencionadas por Ibn Sahl destinada al mantenimiento de la aljama? No podemos asegurarlo, aunque varios indicios permiten argumentar que su origen era árabe.

Escaleras que salvan el bancal a la alberca

Esta hipótesis ya la formuló, antes que nosotros J. Castaño, quien publicó un croquis de las Aguas del Cabildo (Dado que las Aguas del Cabildo se construyeron en época moderna, hemos descrito su trazado de manera más pormenorizada en el plano n°- 26.) a su paso por la actual c/ Platero Martínez. Allí discurría superficial, dejando a la vista su fábrica de sillares y su cubierta, de 60 cm de anchura. Por nuestra parte, añadimos que en su inicio las Aguas de Santa María consistían en una galería subterránea de unos 171 m de largo, y que aunque está ya muy reparada, conserva un tramo de 8 m con paredes de piedra y cubierta del mismo material que podría ser el original, de cronología más antigua (En primer lugar, la conducción consiste en una bóveda de ladrillo con sección de 1,50 m de altura y 0,60 m de anchura (30 m de recorrido)). 


Trozos de pared esparcidos por los alrededores

Dicha galería, de 1,00 m de altura y 0,60 m de anchura, desembocaría en una gran alcubilla que hoy está oculta tras las ruinas de una alberca de cronología moderna, la que representa el plano de 1752. A partir de ese punto, se puede seguir el rastro del canal superficial sobre el terreno hasta llegar a la Huerta del Hierro, tal y como hizo J. Castaño hace 35 años. En la parte que aparentemente está menos modificada, la conducción de piedra mide apenas 22,5 cm de anchura interior (55 en total), siendo sus paredes de unos 12 cm de ancho (vide infra lám. 73).


Salida de agua al arroyo desde la alcubilla de la alberca 
de la Huerta de Santa María por el zarzal.
(Foto Emilio Fernández)

Considerando los datos expuestos en este punto, hemos querido incluir la conducción de Santa María en la nómina de qanawát cordobeses. Sólo con nuevos datos, quizás obtenidos de su excavación, podremos confirmar o desmentir la cronología y finalidad que acabamos de proponer."


Agua salida de la alberca (Foto Emilio Fernández)

Y esto es lo que completa la entrada citada. Decir que el lugar está más bonito, casi en la primavera, que por otra parte es más lógico que en la anterior visita en enero.



Fotografías del autor y vídeo y fotos de Emilio Fernández
Bibliografía de "EL ABASTECIMIENTO DE AGUA A CÓRDOBA" de la Dra. Guadalupe Pizarro Berenjena,

miércoles, 12 de marzo de 2014

ALBERCA CALIFAL EN LA ZONA DEL CORTIJO DEL CAÑO

Alberca califal

En el recorrido de la semana pasada, con los amigos Pedro Yuste  y Emilio Fernández, a instancia del segundo, por esos lugares de la ciudad, antaño rica vega, huertas florecientes -hoy caótica proliferación de parcelaciones, no voy a decir ilegales porque por la política de los hechos consumados, serán legales en cualquier momento-, de la zona del Alcaide, ya comentada en la entrada de los muros viejos de la Colina de los Quemados,  "Medina Azahira, una Córdoba desaparecida y misteriosa", de Rafael Castejón, o de Dar Al-Naura, la famosa almunia califal. 

Aérea de la zona del Caño y del Alcaide

Visitamos también los elementos arqueológicos que citan en su paseo D. Antonio Arjona Castro, Arturo Ramírez y Pedro Marfil, creo que siguiendo los pasos de Castejón, criticando sobre todo, la exclusión de los mismo de Plan Especial de Medina Azahara, lugares que son: el Cortijo del Alcaide (cerca el lugar del encuentro del famoso ataurique de Felix Hernández), La Huerta del Caño de María Ruiz, las dos albercas, el caño, el puente califal y la noria. 

Aérea vuelo 1956 zona del caño y del Alcaide

Cada uno de los lugares se merecen una entrada especial, porque cada uno de los lugares encierran muchos siglos de la historia de esta milenaria ciudad, que fue centro del mundo conocido, y faro de las más variadas disciplinas científicas, que hoy gracias al neoliberalismo y capitalismo feroz está sin aceite para su linterna. En algún lugar he leído que, cuando la ciudad de la Luz, París, era una aldea gala ubicada la Isla de la Cité, a la que no había llegado aún ni Asterix, y tenía doscientos habitantes, Córdoba pasaba de los doscientos mil, siendo mesurado en la medida, porque algunos autores hablan del millón.

Friso del Alcaide

En la conquista, el reparto del botín entre los conquistadores, como en todas las guerras en las que se hace patente el "económico patriotismo y la liberación de los oprimidos", es el hecho principal, y la zona posiblemente por haber sido real, quedó en propiedad de Fernando III, junto con la Arruzafa, Córdoba la Vieja y, ojo -ahora que estamos con esas curiosas inmatriculaciones-, el Alcázar Califal (hoy Palacio Episcopal), para después seguir el reparto a los "nobles" mercenarios, y a los espirituales eclesiásticos. 

Rincón de la Alberca árabe

Parece que en el siglo XIII, el Cortijo del Alcaide era propiedad del Alcaide de los Donceles de quien recibe su nombre. El título de Alcaide de los Donceles, fue un cargo de la Corona de Castilla,  honorífico hereditario y de carácter militar. Tuvo vigencia hasta finales del XVII. Los Donceles, un cuerpo de caballería ligera formado por jóvenes cachorros de origen ilustre que habían sido amamantados como pajes en la casa del rey. 

Revestimiento

Hay al respecto una carencia de datos, que no determinan la fecha de su implantación y que sus primeros jefes sean objeto de controversia, pero como a nosotros nos interesa basarnos en lo concreto, habrá que decir que uno de los Alcaides fue Alfonso Fernández de Córdoba, que se casó con María Ruiz de Biedma, y por eso posiblemente de ahí venga el toponímico: Huerta del Caño; de María Ruiz; Cañito de María Ruiz; Puente de María Ruiz, etc.

El almez dueño de la alberca

Nos centraremos en la alberca árabe, con reminiscencias romanas, como casi todo en esta ciudad, sin olvidar al resto de los sitios. El Cortijo del Alcaide, estiman algunos autores, junto con la Huerta del Caño, formaba parte de la gran almunia o palacio de Dar Al-Naura, cuya noria daba nombre a esta zona, y aunque ésta se ubicara en el vado de Casillas, algo lejos de los sitios citados. De éste último sólo se pueden disfrutar unos gruesos muros apuntalados rodeados de cabras, que arriba tienen su cabreriza. 

Muros apuntalados de Dar al-Naura

"Los restos de alcázares o palacios de una almunia en un área relativamente pequeña (marcada en el plano) se concentran dos albercas,  un puente, una noria y un canal. Todo esto está próximo al lugar donde Félix Hernández encontró los magníficos atauriques que llenan una sala poco visitada del Museo Arqueológico: Al-Na'ura. 

Alberca del Cortijo del Caño de María Ruiz

La alberca más importante y de clara factura califal es la que se conserva en la aún conocida como Huerta del Caño realizada en sillares de piedra calcarenita con una graciosa gola volada labrada en el borde interior. Los habitantes de edad muestran, incorporado a la casa situada al norte del estanque, un grueso muro como restos de "la habitación de la reina mora". 

Foto de la Alberca Árabe de Antonio Arjona

La alberca está enjalbegada y ocupada parcialmente por un almacén moderno. Quedan restos de almagra sobre el suelo impermeable de argamasa. Detrás de esta casa en unas cuadras antiguas existe un empedrado de grandes bolos negros que es resto antiguo o reutilización. 

Puente califal de María Ruiz Arroyo Cantarranas

Cerca de allí, está un puente de un vano, alto de 4 metros, sobre el arroyo Cantarranas de fábrica califal que empieza a desmoronarse perdiendo anchura su calzada. Destacan en él las estrechas y largas dovelas sobre el cauce cenagoso y contaminado.

Alberca de cabeza redondeada y caño

Más al norte, sirviendo de cimiento a parte de la cerca perimetral de una granja porcina, se encuentra un muro bajo de piedra que según parece es parte del canal antiguo de conducción de agua. En su extremo norte existe una alberca de dudosa época con la cabecera redondeada. Más al norte en el límite de la granja junto al camino que le da entrada está la atarjea descubierta mostrando su vano cuadrado de 40x40 cm. aproximadamente. 

Foto edificio antigua noria (Antonio Arjona)

Cerca de allí existe en medio del campo una noria que por su traza y restos parece muy antigua. Tiene pozo oblongo de 4 m. de largo interior con arco central acodando sus paredes mayores y en uno de estos laterales, adosada, una caseta entre dos trozos de muros escalonados que tal vez soportasen la estructura de la rueda de cangilones que sacaba el agua. La noria está llena de agua y no hemos podido ver su estructura interna ni la forma del arco. Merecería la pena achicar el agua para poder explorar y datar la fábrica. 

Aérea actual noria

No lejos de allí y al borde de la carretera asfaltada se encuentra la alberquilla más pintoresca. Tiene planta rectangular a la que le faltan trozos, un muro desplomado y crece en su interior un almezo. Los muros parecen romanos por su hormigón compacto de cal piedra y cerámica. En el lado sur dispone de una graciosa arquería interior pegadiza fabricada en ladrillo y mortero de cal revestida de estuco acabado en rojo al igual que el resto del paramento y fondo de la alberca. 

Alberca arquería

Destacan unos acodados en las esquinas que tal vez se deban a disposición del encofrado y que parecen garantizar la impermeabilidad de las mismas. La arquería tiene trozos perdidos con los restos esparcidos en la alberca y parece obra hispano-musulmana tardía pegadiza a la antigua alberca en el lado por donde entraba el agua ya que su exterior el vertido del opus caementicium no está encofrado. En los muros de los otros lados aparecen revocos blancos por el exterior. En la esquina interior de uno de ellos se ven dos resaltes de ladrillo como si fuesen el arranque de un arco de trompa con un atanor de salida de agua. 

Lado sur alberca

Los habitantes de las casitas habilitadas en los cobertizos del antiguo Cortijo del Alcaide nos hablaron de la existencia de una faja de grandes piedras soterradas en dirección a Córdoba que pudo ser calzada y de la existencia de unas "ánforas" (brocales de pozo) que se rompieron al sacar grava. Del lugar donde se encontraron los atauriques no pudimos ver nada porque está edificado pero lo reconstruido en el Museo Arqueológico de Córdoba, como después veremos, ya es de por sí significativo del esplendor que tuvieron estos alcázares."

Arquería alberca

Para ver estos lugares cercanos, pero tan lejanos en la historia, sólo procede hacer un paseo en automóvil hasta la zona y luego recorrerlos andando, disfrutando de ellos. Algunos están cercados, otros son exclusivamente privados, aunque pueden verse desde el camino. Yo era partidario de la cerca para la protección y la puerta con posibilidades de abrirla para su disfrute. De todas formas algo es algo, menos son otras zonas arrasadas completamente.

)

Fotografías del autor, de Arjona Castro y Google.
Bibliografía del artículo del BRAC "Los restos de la famosa almunia "Dar alna'ura" En el Cortijo del Alcaide y Huerta del Caño de Maria Ruiz excluidos del plan especial de Madinat al-Zahra"

jueves, 6 de marzo de 2014

MONUMENTO A ABBÁS IBN FIRNÁS, EL LEONARDO DEL CALIFATO CORDOBÉS.

Vista frontal (norte) del monumento

El día 5 de marzo, mes por excelencia de efemérides en mi familia, dos de la serie extensa que se repite con notable frecuencia, y en las que curiosamente el número siete forma parte mayoritaria, en realidad esto es una cuestión afectiva personal que no tiene nada que ver con el interesante paseo que dimos. Emilio, Pedro y yo. Estos amigos son dos trabajadores de la empresa de transporte público de Córdoba, que ojalá consigamos entre todos que no entre a formar parte de la vorágine privatizadora que trata de implantar soterradamente la derecha local.

Vista sur del monumento

Entre muchos, uno de los lugares que visitamos cuando íbamos a ver los restos de Dar al-Naura en la esquina del vado de Casillas, que ahora salva el esbelto puente de Abbás Ibn Firnás, fue el monumento a ese rondeño, cordobés de adopción, que fue como el Leonardo da Vinci del mundo árabe. Que es un gran desconocido en nuestra ciudad y un gran personaje estudiado en el mundo árabe. Prueba de ello un monumento que tiene en la propia Bagdad y su estudio en los libros de texto.

Vista aérea actual

Para acceder al monumento se puede hacer incluso en automóvil, pero andando sería la mejor manera, porque si es temporada de aguas el camino para acceder por debajo del puente puede estar embarrado. Se utiliza la carretera actual a las instalaciones de Sadeco y se aparca el vehículo en la zona y por la parte izquierda se puede acceder cómodamente al monumento. 

Vista aérea de 1956 del vado de Casillas

Otra opción sería andando por el paseo que corre desde el molino de la Alegría hasta el propio de Casillas. Este último fue en su momento fábrica de electricidad. La reforma del azud, elevándolo, ha permitido que la lámina de agua en temporada normal, establezca una zona desde el Puente Nuevo hasta el azud que podría utilizarse para deportes náuticos. Otra curiosidad, desde la orilla derecha en los años cincuenta, sirvió la torrontera de la orilla izquierda como receptora de prácticas de tiro de los acuartelamientos militares de la ciudad.

El puente y el monumento

El monumento. Su creador es Francisco Javier Galán Domingo. Escultor madrileño. Nace en Madrid en 1968. Con diecisiete años aún en el bachillerato, Trabaja en el taller familiar de joyería de Alcalá de Henares. Después de una dilatada vida profesional de obras y premios, en 2002 crea una empresa "Mester Artis",  en Antequera (Málaga). Pero si se quiere conocer más del artista se puede hacer en esta Web.


Pedro y el autor delante del monumento (foto Emilio)

Consta del texto/inscripción en el lado derecho, y en el izquierdo está la figura que representa a Abbás Ibn Firnás con el sistema de alas para poder volar. En la parte sur que da al río están grabadas varias alegorías del inventor con su ingenio, y el alzado del puente, junto con las medidas  del mismo: Longitud 365 m., Luz de los vanos 132,50 m., Ancho 30,40 m., y flecha de los arcos 34,23 m. también en ese lado tiene una abertura que, a mi particularmente me parece el perfil de un paracaídas o de un globo aerostático. Aproximadamente tiene una altura de 2-3 metros, 4-5 metros de ancho y más o menos medio metro de ancho.

El texto/inscripción. 

"En el siglo IX, Córdoba era capital / del mundo e irradiaba luz y ciencia / por todo el orbe. 
Abbas ibn Firnás (Ronda 810 - Córdoba 887)
Fue un brillante ingeniero, científico / y humanista de las cortes de / Abderramán II y Mohamed I. Matemático, astrónomo, músico y / poeta, introdujo el cero en Europa, / fue padre de la cristalografía, inventor del primer reloj mecánico, / y constructor del primer planetario. 
Es universalmente reconocido como / el precursor del vuelo y padre de la / aeronáutica.
Con unas alas de seda y plumas se / lanzó desde la torre de la Rusafa / y sobrevoló con éxito las cabezas / de los asombrados espectadores.
Este puente se erige en su honor / y simboliza el salto cordobés que / supuso el de la propia humanidad / hacia la conquista del aire."

Una vista del río y del molino de Casillas desde la plataforma del monumento.

Este rondeño fue conocido como el "el Sabio de al-Ándalus", por aquellos que vivieron su época. Fue un hombre del siglo IX pero podía haber sido del XXI, antes lo he citado como el Leonardo da Vinci del Califato. Y como todos los grandes del momento dominaban muchas facetas. Precursor de la aeronáutica, alquimista, poeta, científico, químico, físico, filósofo, un bereber  humanista en suma. Se introdujo en la corte del II Abderramán y su sucesor y participó notablemente en el desarrollo de la cultura omeya de al-Ándalus.


Molino de Casillas

Perfeccionó la talla de cristal, diseñó una clepsidra o reloj de agua, un planetario y esfera para determinar el movimiento de los astros. Imitó a Dédalo con sus trabajos aeronáuticos, construyó unas alas de madera y las recubrió de telas, una especia de ala delta actual. Desde la torre de la Rusafa, según los textos se lanzó, sobrevolando varios metros por encima de los espectadores. Ese experimento le costó varias fracturas óseas, pero a su vez le permitió considerar la modificación de su artilugio que le permitiera dirigirlo.

Monumento al Abbás Ibn Firnás en el aeropuerto de Bagdad

Por sus trabajos es muy conocido en todo el orbe árabe. Varias universidades tienen su nombre y en aeropuerto de Bagdad existe una enorme estatua de su persona. Y como curiosidad en la Luna un cráter lleva también su nombre. Claro para no perder la desagradecida costumbre cordobesa de no valorar a sus "hijos", la inmensa mayoría de los cordobeses desconocen su existencia, que de seguro, como dijo Emilio, si por el contrario conocen a los vulgares famosillos de amarillentos programas televisivos.

Representación del inventor saltando desde el minarete

De todas formas este puente es un homenaje a este cordobés de adopción, precursor de la Aeronáutica. Él no estaba retenido en Creta, como Dédalo, pero si lo estaba en su tiempo y por eso quería volar y ser un adelantado al mismo. Esto es otro ejemplo más de que la cultura del Califato cordobés fue lo más importante de final del primer milenio y comienzos del segundo, a pesar de que fundamentalismos pretendan ocultar o incluso borrar, su presencia en nuestros días de formas vulgares e imposibles de llevar a efecto. La historia es implacable y no permite determinadas veleidades.

Un detalle, en la visita al monumento nos acompañó esta preciosa ave.

Otras entradas referidas al puente:

El puente de Abbás ibn Firnás (III)

Fotos del autor, Emilio y la Red
Bibliografía variada.