Paneles 1,1-1,2-2,1-2,2-3-4,1
Seguimos en Fuencaliente, hemos vuelto sobre nuestros pasos por la pista de la Batanera y divisamos nuevamente el campo de fútbol a la izquierda y el vacie del "punto limpio", es un decir. Ahora la pista está de zahorra fina y en algunos tramos alquitranada.
Dejamos a la derecha la almazara de Aceites Sierra Morena y antes de hacer un giro de noventa grados al sur encontraremos la entrada del sendero que nos llevará a la Refugio de Quirópteros y las Lastras, en el caso de que queramos acceder a ese paraje desde allí.
Giro al sur y nuevamente al norte para cruzar el río Cereceda. Es de pensar que habría un antiguo molino aceitero en el lugar. Ahora la pista se inclina hacia arriba para acceder a la meseta, de tierra de labor. Una vez adentrados en ella nos encontraremos a la izquierda la señal del PR-CR 33, que nos llevaría a Las Lastras también, o más adelante las Chorreras de la Batanera, incluyendo como es lógico el abrigo de las pinturas rupestres visitadas, y la del ramal de Peña Escrita, que es la que seguimos.
Al fondo se nos presenta majestuoso el macizo de la Sierra Hornilleros y, en un alarde de haber pasado la prueba visual de ver a simple vista, el sistema doble de Mizar y Alcor, de la Osa Mayor (cosa improbable con astigmatismo, miopía y presbicia, y porque no hay más), queremos imaginar ver -más imaginar que ver- en la ladera del gran roquedo de la serranía, la Peña Escrita.
A la derecha está el valle de olivar, que nos ha acompañado bastante camino y al frente nos encontramos un paso canadiense con puerta que abrimos. Ahora sí, el aparcamiento, un frondoso bosque enfrente y arriba de la Peña a media ladera lo que estimamos es Peña Escrita. En algunos textos nos encontramos que dice que la altura a la que están las pinturas es de 920 mts. en el murallón cuarcítico de orientación S-SE de paredes quebradas, que ahora nos presenta su lado sur.
Sendero de subida a la pinturas de peña Escrita
La zona es muy rica en vegetación, y sin ser como somos muy poco de nada, hemos podido ver una amplia variedad de jaras; pringosa, rizada, y algunos ejemplares de morisca; así como romero, aún en flor a pesar de que su norma de floración es de dos veces al año, en primavera y otoño; labiérnago, cantueso, cornicabra y tomillo, quejigos y enormes madroñales; ah, y lentisco.
Al este del aparcamiento un bosque de pinos sube por el valle que forma el macizo de Hornilleros, una cadena impide el paso al camino, para evitar los vehículos de cuatro ruedas. A la izquierda un bonito y arreglado sendero de mampuestos, que en principio incita a tomárselo con calma. En algunos lugares se han tallado en la roca o reconstruido escalones para hacerlo más cómodo.
El agua baja por el mismo configurando arroyuelos, lo que demuestra la riqueza de la zona o que ha llovido bastante. Ya se nos presenta la zona de las pinturas, en este caso no importan los problemas visuales citados. Las rocas son caprichosas y les vamos poniendo nombre a cada una en función de su configuración o parecido con un camello, un lince, o incluso un malacara.
La primera impresión de la Peña Escrita desde abajo, son los poblados indios de los anazasi -como los llaman los navajos-, construidos en los acantilados del estado USA de Colorado, claro aquí son unas rejas en lugar de adobe y piedra. La verdad es que sólo es una impresión a lo mejor exagerada.
Roca gorila malacara
Nos llama la atención en primer lugar los líquenes de color amarillo limón, brillantes, adosados a la roca. Dicen que su hábitat es asociarse a rocas ácidas e indican un bajo nivel de contaminación, no sé. También otros líquenes más clorofílicos, preciosos, tapizan la rocas. Un mirador nos permite todo el valle, la meseta, el enorme olivar, Fuencaliente y Azuel al fondo sur, es decir en Andalucía, cosa que nos agrada ya que estamos en Castilla.
Ahora lo importante. Peña Escrita está repleta de dibujos o pinturas rupestres, los colores son todos alrededor del rojo, oscuros, o vinosos, ocres anaranjados o amarillentos. Las rocas de por sí presentan ese color rojizo, posiblemente oxido de hierro (yo me tiro a la piscina siempre sin agua, por lo que reitero mi desconocimientos de la materia).
Una precisión, los primero que se ve -yo los hubiera quitado- es el nombre de los tontos que quieren perdurarse. Te encuentras en el lateral derecho según se mira el lugar, a "Tomas -sin acento- 9-91" y un emoticono, a "Ramon -también sin acentuar-, 9-91" -por la fecha parece que la tontería la hicieron juntos-, y lo que parece el ojo de una cerradura; así como a la izquierda arriba a Toribio 25-7-90. Por otra parte y en su descargo, en Pompeya también había grafitis.
Ahora lo científico. De la página Arqueomas, Tenemos seis paneles:
"El panel 0, situado a la izquierda sobre una zona elevada, incluye tres motivos: un antropomorfo con el falo muy marcado, una figura animal (probablemente un ciervo) y tres barras verticales.
Panel 0
En el panel 1, uno de los más llamativos y mejor conservados, se contabilizan veintisiete figuras, entre las que destacan siete parejas de antropomorfos. Se conoce como “la pared de las paridoras” pues las figuras femeninas aparecen agachadas, con las piernas flexionadas y abiertas, y bajo una de ellas se observa otra pintura que podría interpretarse como su descendencia. Junto a las parejas aparecen también antropomorfos aislados, representaciones de animales, soles y dos ramiformes.
Paneles 2,2-3-4,1-4,2
El panel 2 incluye un total de catorce representaciones: antropomorfos, ramiformes y pectiniformes.
El panel 3 está compuesto por siete figuras: una pareja de antropomorfos, un sol y una mujer bajo la que aparece un animal muerto.
El panel 4 está formado por veintiocho figuras: dos “paridoras”, una acéfala y otra con un tocado en la cabeza, un sol, un ramiforme, un pectiniforme y un amplio grupo de antropomorfos.
El panel 5 incluye seis figuras entre las que destacan restos de dos antropomorfos y ramiformes.
Panel 1
En el panel 6, situado en un bloque separado de la pared, se han documentado siete figuras de las que sólo dos, un antropomorfo y un halteriforme, son observables de forma más o menos clara."
Panel 2,1
Todo ello lo podemos ver más detallado en los calcos que proceden del extraordinario trabajo de Doña Macarena Fernández "Pinturas Rupestres y esquemáticas del Valle de Alcudia y Sierra Madrona", y claro en las fotografías.
Recordad que el descubridor es el mismo de las del Abrigo de la Batanera, es decir el párroco de Montoro y que también los estudiosos del Quijote dicen que D. Alonso mencionó en otro de sus pasajes el lugar como de dioses extraños.
Panel 2,2
Recordad que el descubridor es el mismo de las del Abrigo de la Batanera, es decir el párroco de Montoro y que también los estudiosos del Quijote dicen que D. Alonso mencionó en otro de sus pasajes el lugar como de dioses extraños.
Panel 4,1
Mi Amigo Emilio (Vértice), me ha facilitado una serie de yacimientos con pinturas rupestres en el Valle de Alcudia (Ciudad Real).
YACIMIENTOS DE PINTURAS RUPESTRES
El Escorialejo. (Fuencaliente), Morrón del Pino. (Fuencaliente), Abrigo de la Sierrezuela. (Fuencaliente), Cueva de las Sierpes. (Fuencaliente), Cueva de la Estación. (Cabezarrubias del Puerto), Collado del Águila. (Solana del Pino), Peñón Amarillo. (Solana del Pino), Abrigo de la Jalbegada. (San Lorenzo de Calatrava).
Emilio es uno de los mayores conocedores del patrimonio de la provincia de Córdoba y otras limítrofes, y su colección de fotografías relativas al patrimonio es una verdadera maravilla, que se pueden visualizar en Flick, con su seudónimo.
Llamativos líquenes amarillo limón
Paneles de las pinturas y su posición en el abrigo de Peña Escrita
Alzado, planta y perfil de las pinturas.
Calcos de los Paneles
Panel 0
Panel 0-1
Panel 1-1
Panel 1-2
Panel 2-1
Panel 2-2
Panel 3
Panel 4-1
Panel 4-2
Panel 5
Panel 6
Fotografías y vídeos del autor
Bibliografía: Arqueomas; Dña. Macarena Fernández: "Pinturas Rupestres y esquemáticas del Valle de Alcudia y Sierra Madrona"
4 comentarios :
Buenas tarde, amigos. En la mayoría de las ocasiones los autodidactas por sus inquietudes hacen que muchos doctos se replanteen sus dictámenes. Tenemos como ejemplo a Schliemann. Paco, sigue acercándonos tus inquietudes. Un abrazo.
P/S: Al eminente arqueólogo Don Juan José de Rada y Delgado, por das las cosas de paso, le metieron un gol por toda la escuadra en las excavaciones del Cerro de los Santos. Este hecho hizo que se examinases con más detenimiento los hallazgos arqueológicos. Hay una anécdota sobre esto: Descubrieron a un arqueólogo haciendo catas en unos enterramientos, que por su abundancia iban a ser cerrado, ya que el coste no justificaba continuar con los trabajos. Este arqueólogo introducía en las tumbas un elefantito de plástico made in Japan. Cuando lo pillaron dijo: “ahora no tiene importancia, pero dentro de unos cientos de años, igual miles, los arqueólogos se van a volver locos, igual que está pasando con nosotros, porque en lo que descubrimos y estudiamos hay mucho camelo” No sé si es una leyenda urbana, pero tiene más razón que…
Inquietantes pinturas, al menos para mí, por su esquematismo.
El día se ve también hermoso por esa zona en las fotografías, debisteis echar una buena mañana.
Muchas gracias Patxi. Desconozco la anécdota que citas. Pero llevas razón la historia es muy manipulable y es normalmente de quien la escribe. Ahora hay métodos científicos para datar con notable aproximación la fecha de muchas cosas, no sé si con las pinturas pasará lo mismo.
De todas formas a lo largo de la historia ha habido mucha estafa. No se si cuando pasen dos mil años los dibujos (el emoticono, y el ojo de cerradura) de Ramón y Tomás de la rocas, los estimarán algunos científicos como obras de la antigüedad. Un abrazo
Ya ves Rafael el tuerto no metió la pata este día, aunque fuimos muy prudentes. Desde luego no era de gran dificultad el sendero. El día estupendo, esperábamos más frío, pero no bajamos de 4 ó 5 grados, que a medía mañana se quedaron en nueve, claro al mínimo ejercicio entrabas en calor. Un abrazo.
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