Esta mañana de agosto he efectuado una visita a la curiosa y artística exposición, de la Asociación de Ceramistas Terra Sigillata, en la rosaleda del Jardín Botánico, Luces del Jardín. Recomiendo la visita por la noche, porque a las horas que lo he hecho yo, además de no poder verla en todo su esplendor, que es iluminada, los rigores de agosto pueden hacer de las suyas.
Estará abierta hasta el 7 de septiembre y la mejor forma de visitarla es hacerlo una tarde que haya actuación y el Programa Raíces 2012 tiene previstas una serie de actuaciones a las 22,00 h. que permiten compaginar la visita al evento y a la exposición. Los días 22,23,24,29,30 y 31de agosto y los 5,6 y 7 de septiembre hay actuación y para verlo mejor en la Web del Jardín Botánico.
La exposición consta de una serie de piezas de cerámica que a sus vez son originales lámparas. Es la quinta exposición que realiza la Asociación en el Jardín Botánico de Córdoba. Siendo un clásico de las exposiciones que se realizan en el Jardín.
La técnica es variada, desde modelado escultórico, esmaltes, rakú etc. con lo que se consiguen diversas formas y efectos visuales especiales, muy artísticos y originales. La Asociación de Ceramistas de Córdoba Terra Sigillata se fundó hace nueve años, en 2033, y sus objetivos son la revalorización de la tradición artesana de la cerámica y su vertiente artística.
Fotografías del autor
Bibliografía de la Web de la Asociación.
Muchas de ellas son super originales. me imagino que de noche seràn mucho màs atractivas.
ResponderEliminarQue bueno Paco como nos hemos conocido hoy, se lo he contado a mi mujer y a mi hijo y no se lo podìan creer....jajajaa...
Bueno que espero que me llames si tienes algùn hueco libre y nos vemos con nuestras respectivas ò solos como a ti te venga mejor.
un abrazo
paco
Amigo Fus:
ResponderEliminarTengo las fotografías nocturnas pero no se ven para mi gusto muy bien. La otra noche estuvimos allí, en el Jardín Botánico –evito lo de Real por sentirme republicano-, en un concierto de música fusión con sones flamencos, en el que participó nuestro hijo Gabriel. Vimos en vivo las cerámicas repartidas por la hermosa rosaleda del Jardín a la orilla del río Guadalquivir, noche que nos dio un respiro a los cuarenta a la sombra. A lo mejor las pongo.
Lo curioso de habernos conocido, yo me precio de tener un par de cosas bien; buen oído para los acentos, en los que puedo determinar casi la zona del escuchado y ser mediano fisonomista. De lo demás, palabra de honor, no puedo presumir de nada. En resumidas cuentas que te cacé al vuelo entre tanto comunitario y no comunitario, de esa torre de babel que es, lo que fue el apacible pueblo pesquero de Torremolinos, y más el atardecer de una de las playas “cordobesas” playa de la de la Carihuela, junto con otra que es Los Boliches. Nosotros, cuando un paisano nos dice que ha estado en Punta Cana u otra cualquiera allende los mares, le miramos la axila y si la tiene morena del sol es falso, ha estado en una de la citadas playas, y se le ha puesto morena de tanto levantar el brazo de saludar a otros cordobeses.
Cuando después de los saludos nos despedimos, se acordó Conchi de la similitud -guardando las distancias y dentro de la exageración que nos es propia- de cuando Henry Stanley, periodista del New York Herald, encontró a Dr. Livingstone, investigador, en la inmensidad de África, a las orillas del lago Tanganica, allá por el siglo XIX, después de llevar perdido el segundo tres años, y le dijo con la flema inglesa que los caracteriza:
-¿Dr. Livingstone, supongo?
Claro lo nuestro fue, sin flema, a voces:
-¿Tú eres Fus , no?
-¿Y tú Paco Muñoz,no?
Y los abrazos de rigor, Luego de eso estuvimos hablando todo el rato, de la curiosidad de las cosas y que esto es un pueblo pequeño, no Torremolinos que es muy cosmopolita, si no el mundo.
Otro abrazo Fus