domingo, 22 de julio de 2012

MUSEO HISTÓRICO DE BELMEZ Y DEL TERRITORIO MINERO

Panel de la puerta del Museo

Era lógico y obligado que estando en la villa de Belmez, a 71 kilómetros al norte de la ciudad, después de haber visitado el Dolmen Casas de Don Pedro, visitáramos el Museo Histórico de Belmez y del Territorio Minero. Siguiendo las directrices de Paco que había estado allí trabajando unos meses, nos dirigimos al Ayuntamiento, edificio de la segunda mitad del siglo XIX, al lado del cual estaba el Museo, en la C/. Córdoba , 3. Allí nos recibió el encargado del mismo que amablemente ejerció de cicerone, con mucha voluntad, pero para mi gusto demasiado locuaz. Hay que reconocer que el Museo está bastante bien explicado con los paneles y rotulación de vitrinas y utensilios.

Castillo de carbón y latón.

Parece que el edificio tuvo otros usos en su momento, pósito local, etc. El encargado nos dijo que el edificio fue cárcel, pero en este país con la Inquisición, guerra civil, dictadura fascista, etc. ha habido muchos edificios lamentablemente destinados a la retención de personas. Lo cierto es que el edificio es bastante funcional, de dos plantas, con un enorme patio y otras dependencias, creo que ajenas al Museo. 

Sala de instrumental de minería

Sala de la Minería del Carbón, donde podemos ver toda suerte de herramientas de la minería. Paleontología, con multitud de fósiles animales, vegetales y minerales y luego la de Arqueología en la planta alta, donde se encuentran los restos del Neolítico Medio, Edad de Bronce, Iberos, romanos -extraídos de yacimientos cercanos La Loba, Sierra Boyera y La Gata-, visigodos y árabes -cuyo exponente más señalado de estos últimos es el castillo-. 


Taladros y diverso material

“El Museo Histórico de Belmez y del Territorio Minero es propiedad municipal y abrió al público en el año 1998. El hermoso edificio cuenta con tres salas. En la primera de ellas, la de la Minería del Carbón, se expone una de las colecciones relacionadas con el carbón más completas de la provincia: barrenas, lámparas mineras, aparatos de seguridad o herramientas de perforación y voladuras.  


Lámparas mineras

Más adelante, en la Sala de Paleontología, podemos observar una colección muy variada de minerales y fósiles animales y vegetales de une calidad y belleza únicos. Sin duda, merece la pena detenernos en la colección originaria de la Cuenca Carbonífera de Belmez y ver de cerca el Neuropteris guadatiensis, sólo existente aquí.


Sala de instrumentos

En la primera planta se encuentra la Sala de Arqueología. Nuestro viaje comienza en el Neolítico Medio, momento en el que los habitantes de Sierra Palacios I construyen sus cabañas con barro secado al sol y ramaje para las cubiertas. La dieta de las gentes de Sierra Palacios I se basará en el trigo y en lo que el ganado produce: leche, queso, huevos y carne. Ya en el Calcolítico se explotan los recursos mineros de la zona y, en el yacimiento del Dolmen de las Casas de Don Pedro, se recuperan algunos fragmentos de cobre trabajados de forma rudimentaria.


Taladros para los barrenos 

Hacia el año 1000 a.C. los pobladores de la zona ocupan una extensión hoy sumergida bajo las aguas del embalse de Sierra Boyera, en el que se recuperan tanto fragmentos de cerámica orientalizante como de época ibérica.


Barrena romana

El Museo Histórico de Belmez y del Territorio Minero cuenta con una interesante colección de época romana. Las excavaciones codirigidas por J. Blázquez y C. Domergue en el yacimiento de La Loba entre 1978 y 1981 ponen de manifiesto que los filones de este yacimiento producían plata, plomo y cobre y que el poblado minero se construyó hacia el año 120 a.C. Además, en el Museo, se exponen piezas de yacimiento como La Gata, Casas Baratas y del entorno urbano de Belmez, entre las que destacamos la célebre inscripción de Quintus Valerius Severinus.”


Fósiles pino y palmera

Es de admirar una pequeña ciudad como es Belmez, 3440 habitantes en 2005, tenga una estructura museística que quieras que no, es un costo añadido al presupuesto municipal. Sus usos están ampliados a otras facetas culturales para poder optimizar su mantenimiento. Desde el museo se organizan rutas por lugares de interés cercanos a Belmez para poder ver los dólmenes, pozos de carbón y restos romanos. 

Helechos

Cuando con motivo de nuestra visita, comienzas a investigar en diversas fuentes, descubres un pasado rico basado en la minería, que depende al final de la globalización maldita, a la que solo interesa el tráfico de esclavos y de capitales. Si el estado controlara las fuentes de energía en lugar de los privados, el carbón seguiría alimentando la central de Puente Nuevo.

Neuropteris guadatiensis

Que dicho sea de paso se construyó para aprovechar la cuenca minera, pero ahora compran el carbón en países extranjeros, donde seguro los mineros estarán más explotados, porque el capitalismo siempre aprieta del trabajador para rentabilizar su producto, nunca cede de sus beneficios. Se me puede decir que así es el comercio, y yo puedo decir que no comparto ese sistema, y que lo público bien administrado daría para todos. Fue también una “burbuja” minera –antes solo conocíamos las de la gaseosas sobrecargadas de carbónico, que nos salían por las fosas nasales-

Planta superior

No se buscaron muchas alternativas, aunque la construcción del embalse puso en regadío muchas hectáreas, pero claro ahí se topaba con los intereses europeos, arranca esto, siembra esto otro, subvenciono aquello –subvenciones que hicieron más ricos a los ricos- y a dormirse en los laureles y cuando se acabaron las subvenciones –que fueron como la droga en la puerta de los colegios- otra vez a sufrir con los cultivos y cabaña ganadera desmantelados. Todo parece estar planificado en un laboratorio mundial por mentes criminales.

Otra vista de la planta superior

Volvamos al Museo. La Paleontología y Paleobotánica, está bastante representada en sus salas gracias a que la fauna y la flora procedente de periodos lejanos se quedaban cogidas “apretadas” en sus tierras, en el subsuelo, y la minería la sacaba a la luz.  Los fósiles eran depositados en las escombreras y colaboradores los traían al Museo. Por ello y gracias a su altruismo se pueden contar con una extraordinaria colección: Del Carbonífero Westfaliense vemos las  siguientes muestras: Lepidodendro aculatum, Lepidodendro lossenii, Sigillaria davreuxII (Brogniart), Sigillaria polyploca (Boulay), Stigmaria ficoides (Brogniart), Calamites cistiis (Brogniart), Calamites sckowII, (Brogniart), Alethopteris lonchitica paripteris gigantea, Asterophyllites caraeforms, Asterophyllites  grandis, Asterophyllites  grandis paripteris gigante, Calamostachys charaeformis, Cycloteris, Mariopteris muricata (Zeiller), Neuropteris guadatiensis, Laveineopteris Aff. Tenuifolia, Lonchopteris rugosa (Brogniart), Palatopteris (Schatzlaranse), Palmopteris (Furcata), Rhacopteris elegans, Zeilleria Ovoldensis. Nos enseño el amable cicerone una camisa de serpiente fosilizada y una cola de lagarto.

Ladrillos

Cuando vemos esos helechos, pinos, palmeras pétreas, la flora fósil ligada a las cuencas mineras del carbón, le comenté a Rafael si hubiera habido más presión a lo mejor en lugar del carbón tendríamos petróleo, otro Valdeajos cualquiera, o para ser más ambiciosos diamantes. Claro la opinión desde la ocurrencia del absoluto neófito. Helechos de ayer, entre 355 y 295 millones de años.  El Neuropteris guadatiensis, de la fotografía. El genero significa helecho, ¿pero y la especie significará de la cuenca del Guadiato? Parece ser único de esta zona. La lista de minerales amplia: Malaquitas, Cuarzos, Berilo, Siderita con Bornita, Pirita, Pirita Cobriza, Antracita, Pliegue de Carbón, Pliegues Kink-Bands, Antigorita (Serpentina Alterda), Milonita de la Falla del Guadiato, Galena, y Fosforita.


Molino

Otra cuestión son los restos arqueológicos, los de mayor relieve son los de las excavaciones de la Mina de la Loba (Fuenteobejuna), entre los años 1978 y 1981, en colaboración entre el Seminario Antonio Carbonell (J. M. Blázquez) y la Universidad de Toulusse-Le Mirail (Claude Domergue). Materiales expuestos: Pesas de Telar, Cerámicas finas, de almacenamiento (ánforas); luego Cucharas de plomo, cordones de bronce. Útiles mineros como cinceles, restos de crisoles cerámicos de fundición; y otras piezas como una piedra molino de mano. Hay dos piezas que se encontraron en un majano del cerro Masatrigo  (Fuenteobejuna). Son un fragmento de escultura togada, y otro de basa con arranque de fuste.

Inscripción de Quintus Valerius Severinus

De la Etnografía minera tenemos: “Del siglo XIX lámparas (Lámpara de Acetileno de llama desnuda y parábola, Lámparas de acetileno de mano, Lámpara Gallo (1880)) y un Portadocumentos de metal. De principios del XX:  útiles metalúrgicos, espátulas y cucharas, cinceles de cantera para trabajo en piedra, lámpara de seguridad de Bencina, Farol Ferroviario de Señalizaciones (1940), Lámparas de Carburo (1910, 1940), y ya de lleno en el XX : Herramientas varias (Alicates, llaves fijas, Lámpara de seguridad de Bencina, Faro de bicicleta iluminación a pilas, Casco minero con lámpara y batería, Juego de Densímetros, Máscara antipolvo, Respirador de emergencia, Medidores de Gas Grisú (Metano),  Placa de Guarda de la Mina “La Pobreza”, Lingotes americanos de plomo,   Maquinaria (trócolas, comprobadores eléctricos 1950, Ciclón de Granulometría-Densidad y Manómetro), Prensa de planos y proyectos y Balanza de Precisión Metálica.”


Texto de la inscripción

El yacimiento minero romano de La Gata fue factoría relacionada con la extracción de material, alguna de las piezas son medio lingote de plomo con inscripción SS, medidas de pesas de plomo y algún fragmento de tubería de plomo. El yacimiento romano de Casas Baratas, es el que más ha aportado. Materiales, como cerámica Sigillata, lucernas, ladrillos (probablemente de mosaico de opus latericium) y elementos decorativos en escayola, algo poco frecuente de encontrar. Del periodo Visigodo hay muy poco, la numismática es la referencia de ese tiempo. Hay un capitel de granito que procede del poblado de Doña Rama. 
Restos romanos

Lo interesante es hacer una visita, de esta forma se amplía el número de visitantes y contribuimos a su continuidad, objetivo principal de todos los museos. En los tiempos que corren de grandes estafas dinerarias toda ayuda es poca, porque la fragilidad de la cultura está mucho detrás de las necesidades primarias.

Vasijas del yacimiento de La Loba

Sus horarios de visita son de Martes a Domingo, de 10:00 a 14:00, aunque, previo concierto de cita, puede visitarse por la tarde.
 

Ade, la Conservadora del Museo nos ha facilitado, gentilmente, una página para saber más sobre el Museo Histórico de Belmez y del Territorio Minero, así como el teléfono de contacto con la dirección del Museo y la Oficina de Turismo: 957 580 702
 



Fotografías y vídeo del autor, una de la Web
Bibliografía de los textos del Museo.

9 comentarios :

Lansky dijo...

'Neuropteris guadatiensis', el género en mayúsculas y la especie en minúscula. Puede parecer una pijotería que a casi nadie interese escribir correctamente el nombre de un helecho de hace millones de años o el de una cucaracha o un loro, pero para mí es tan importante como para otros cualquier falta de ortografía. Por lo demás, muy interesante, como todas tus entradas.

Un saludo

Paco Muñoz dijo...

Lo rectifico, porque lo importante es no hacer las cosas bien si no intentarlo por lo menos. Aprovecho y te preguntó ¿sabes que significa la especie? Dentro de mis cortas luce lo asocio a la cuenca minera del valle del Guadiato ¿Es posible?
Un abrazo y como siempre muchas gracias.

Adelina Cano dijo...

Estimado Paco:
Soy la conservadora del Museo de belmez y tengo el placer de poner el enlace de la pagina web del Museo Histórico de Belmez y del Territorio Minero http://museohistoricodebelmez.wordpress.com/
así como ofreceros el teléfono de contacto con la dirección del Museo y la Oficina de Turismo, caso de que queráis realizar una visita un poco más a fondo: 957 580 702.
Un saludo

Lansky dijo...

No sé si entiendo bien tu pregunta; supongo que te refieres al significado de esa especie en concreto y no del concepto de especie en general. Pues bien, cómo sabes o intuyes la mayoría del carbón que concemos como 'hulla' proviene del periodo del mesozoico o secundario que precisamente se llama 'carbonífero', y está formado por capas y capas de vegetales -en especial helechos arborescentes coetaneos y anteriores de los famosos dinosaurios- comprimidos y no oxidados, es decir, reducidos químicamente. ¿Era eso?

Lansky dijo...

Fé de erratas: del Primario o Paleozóico, no del Mesozóico

Paco Muñoz dijo...

Me refería a la especie en particular pero he comprobado que corresponde la especie a la cuenca del Río Guadiato, es oriunda de la zona. Muchas gracias de todas formas.

Paco Muñoz dijo...

Estimada Ade

En primer lugar pedirte disculpas por no haber contestado a su debido tiempo, por alguna razón no ha aparecido el aviso en mi correo, pero Conchi, mi mujer, ha visto que no te había contestado y me lo ha comunicado, te ruego me perdones cosas de la informática.

Darte la enhorabuena por el museo, en la parte que te corresponda, y como no al Ayuntamiento que se preocupa por la cultura en estos malos tiempos que corren para ella. Sabemos de la dificultad que conlleva tu labor. Decirte que quedamos muy gratamente sorprendidos con los fondos, Rafael Jiménez, Paco Madrigal y yo. De una tacada hicimos el Dolmen Casas de Don Pedro y el Museo. Pensamos también en el Castillo pero la temperatura –a pesar de que no hizo un mal día- nos hizo desistir. Tomo nota del teléfono y de tu ofrecimiento. Y rectificaré la entrada en mi blog para poner el enlace a vuestra Web, que es muy interesante y didáctica.

Un cordial saludo y muchas gracias.

PD: He estado visitando tus blog y en el Trocatrufo, hay unas estupendas fotografías del castillo y del Dolmen. Del Blog Cuadernos en el Fogon, que decirte, se ponen en marcha las papilas gustativas sólo con ver las fotografías.

Gerardo dijo...

Sin quitarle méritos al museo, ¿recoge algo de las consecuencias ambientales y sobre la salud de los mineros?
He visto que hay poca información para los legos en la exposición de las piezas.

Paco Muñoz dijo...

Estimado Gerardo, creo que ninguna explotación de la época recoge nada de ese tema, estoy pensando en Rio Tinto y su Museo de las minas, y si ves la representación de la minería romana, y los métodos de trabajo, eran los que eran. Menciono Rio Tinto por ser esa explotación la que por los métodos del tratamiento del mineral, tuvo una de las primeras luchas medioambientales de la minería española, en el famoso “año de los tiros” y la lucha por el aire contaminado de la famosas y venenosas “teleras” del cobre. Esa lucha donde los masacró el ejército español -este glorioso ejército que ha ganado más guerras contra su propio pueblo que contra otros extranjeros-, lo fue por la salud de los mineros y la región, no por el sueldo. La de 1920 ya fue otra cosa. Las herramientas y las cuestiones ambientales son las que son, y a medida que han ido pasando los años, cualquier mejora de la salud ambiental ha ido paralela a la lucha de ese colectivo de trabajadores. Al patrón como a todos los patrones, sólo le ha interesado siempre la cuenta de resultados, no la salud de sus trabajadores. No tenía el mismo valor el ser humano en la época ibera o romana que en otras más actuales, aunque la ambición comercial era la misma. En cuanto a la información si entras en la Web referenciada al final encontrarás algo más.