LA ESTACIÓN DE LA BALANZONA Y EL TRAMO FÉRREO CÓRDOBA-CERRO MURIANO.

Boca del túnel de la Balanzona en dirección Córdoba

Ayer sábado estuve, después de haber visitado la Loma de los Escalones, en la estación de ferrocarril de la Balanzona, bueno lo que queda de ella. A propósito de esta visita, vamos a hacer un pequeño recorrido por esa línea que algunos hemos conocido e incluso utilizado, cuando era el medio de transportar a los reclutas a Cerro Muriano. Hoy no existe como tal.

Depósito de agua para las máquinas de vapor

La línea llamada de Almorchón comenzaba en Cercadilla. Se inauguró en septiembre de 1873. Y hasta el Cerro Muriano que es el tramo a comentar, tenía unos diecisiete kilómetros. Un viaducto y cinco túneles: El del Cerro de D. Pedro, de 114 mts. en el km. 7,543. El de los Pradillos de 79 mts. Km 8,509. El de la Carretera de 87 mts. Km. 10,471. El de la Balanzona de 323 mts. Km. 12,112 y el de los Piñoneros de 141 mts. en el Km. 15, 243.

Cambiador de agujas

La línea tenía un enorme desnivel para el tráfico ferroviario, cuántas veces hemos visto ayudarse dos máquinas de vapor para subir, aunque luego con máquinas diesel la cosa era algo distinta. Nada más pasar el paso a nivel del Brillante, tenía 18 mm., unos 20 mm. en Mirabueno y pasado el puente de Hierro subía a 27 mm., llegando en algunos tramos a 30 mm. En algún sitio he leído que era una de las líneas de mayor desnivel del país, sobre todo el tramo Córdoba-Cerro Muriano. Esto cualquier ferroviario lo sabe bien.

Estado de las instalaciones

Como curiosidad, en principio cuando se construyó de pensó en la tracción de carne o sangre, para subir, y luego la inercia para bajar. Aunque al final se impuso la tracción de vapor.

Antigua estación de la Balanzona

Hubo varios accidentes, casi todos ocasionados por el desnivel de la línea, por ello tenían las estaciones Mirabueno, los Padrillos y la Balanzona vías de seguridad, que permitieran en un momento desviar de la línea principal y parar las composiciones, fuesen de mercancías, viajeros o mixtas. Unos de los más trágicos e importantes sucedió en enero de 1920, concretamente el 23. Un tren mixto de viajeros y mercancías compuesto de, locomotora, furgón, un vagón de primera, uno de segunda, y dos de tercera, vagones de mercancía y el furgón de cola, en total veintitrés unidades, que había pasado el control de frenos antes de bajar la Balanzona, pero que pasó por esta estación sin control alguno. Se comunicó el hecho a Córdoba para dejar la vía expedita.

Artilugio para las traviesas

El tren pasó los Pradillos sin poder parar, la vía de seguridad aún no estaba terminada. Paso el túnel de los Pradillos y en el del cerro de D. Pedro, descarriló el vagón de segunda quedando toda la composición allí parada. La locomotora continuó aún camino y quedó parada cerca del viaducto. Ese túnel tiene una acusada curva.

Los Pradillos

El diario "La Voz" de Córdoba, daba la noticia el día 24 y aportaba –como puede verse en la fotografía de la página- una fotografía de las víctimas y otra de la entrada del túnel:

La Voz

"A las doce de la noche tomamos el camino hacia el escenario de la tragedia. Llegamos primero a la boca del túnel donde se encuentran destrozados los tres coches de viajeros. Al lado de una inmensa hoguera se encontraban cuatro números de la guardia civil y dos obreros de la Compañía. La situación de los restos de los vagones, idéntica a la de esta mañana, indicaba que no habían puesto una mano siquiera para desalojar la entrada del túnel. Quizás tras aquellos informes montones de hierros y maderas se encuentren cadáveres de hermanos que estén demandando la caridad de una pronta sepultura. Posible es que aún existan víctimas con resto de vida que estén sufriendo horriblemente aprisionadas. Esto es poco probable después de contemplar el estado en que quedaron los coches. Hemos oído afirmar a personas bien enteradas que el número de viajeros pasaban de treinta, el de empleados de Compañía deberá constar de quince individuos, cifras que sumadas hacen ascender el de personas que conducía el tren a cuarenta y cinco. Han aparecido siete muertos, diez y siete heridos y tres ilesos; total, veintisiete. ¿Donde están los dieciocho restantes? Aunque sea equivocado el cálculo referente a los viajeros, no puede suceder lo mismo con el de empleados. El tren llevaba diez frenos y dos galgas y a menos que la Compañía no tuviese dotado el tren con el personal necesario, en cuyo caso su responsabilidad sería enorme, doce eran los guardafrenos que en el convoy iban. Han aparecido tres ¿dónde se encuentran los nueve restantes? Es indudable que bajo los restos de la catástrofe"

Los Pradillos desde Google

Posteriormente se construyó la vía de seguridad, en el cerro cerca de los Pradillos, dónde están las antenas de telefonía en la actualidad, consistía una trinchera con gran desnivel y la vía de arena, que se introducía en el monte. Puede verse en las fotografías de Google.

Tunel donde se produjo el accidente de 1920

En 1964 ocurrió otro accidente que, en esta ocasión la vía de arena de los Pradillos frenó, no sin evitar el fallecimiento del maquinista de la primera máquina y el fogonero, y causar otros heridos. Tuvo lugar en mayo.

Accidente 1964 ABC

Esa estación, la de los Pradillos ya apenas existe. La de Mirabueno, ídem de lo mismo, y la de la Balanzona hace unos años la vi y aún conservaba sus edificaciones. Ayer sábado, la visité otra vez, como podemos ver en las fotos actuales, comparándolas con otras cuando estaba en actividad, se ve que sólo quedan algunos raíles -que no se han llevado los “rumanos” cordobeses, siempre se le echa la culpa a los de Rumanía- y la herrumbre de algunos artilugios de la época, depósitos de agua, cambiador de agujas y sobre todo nostalgia, mucha nostalgia, de un pasado cercano que se ha dejado en pro del motor de gasolina y la carretera.

Sin railes

Hay proyecto de rehacer el trazado, pero a lo peor es como el del Palacio del Sur. El acceso a la estación es difícil, lo tienes que hacer por propiedades particulares que no están por la labor, y un perrazo que cuando no está en su territorio es manso y cuando está -se conoce que será interino aún-, te come. A mí me hizo subir por caminos de cabras –seguro que lo son, por las deposiciones de éstas que tapizaban el sendero-, para no discutir con él, aunque se puede entrar por la curva de la vía y un camino pasando Villa Enriqueta o lo que queda de ella, que eso es otra.

Apartadero de Mirabueno

Pues otra cosa más para el recuerdo de algunos y el nuevo conocimiento de otros. Si construyeran la vía verde podría ser muy atractivo el recorrido, andando o en bicicleta. Descanse en paz la estación de la Balanzona.